La Municipalidad de Jerusalén anunció el lunes que pasaría de usar artículos de plástico desechables en los jardines de infancia y algunas escuelas de la capital a usar una vajilla que pueda lavarse y ser reutilizarse.
El alcalde de Jerusalén, Moshe Lion, reveló que la decisión se produce después de un exitoso proyecto piloto en 50 jardines de infantes durante los últimos seis meses.
“En los próximos meses, el cambio llegará a todos…. los jardines de infancia y las escuelas, cada uno de los cuales adoptará la solución que mejor se adapte a sus necesidades. Algunos jardines de infancia tendrán lavaplatos, otros lavarán sus platos y otros verán los platos que los padres se llevan a casa”, escribió el León en su página de Facebook.
Los centros comunitarios también participarán en la acción ambientalmente amigable, dijo Lion, llevando a cabo “programas especiales en sus vecindarios”.
En la primera etapa, 448 jardines infantiles y programas de cuidado posterior, junto con 84 escuelas, dejarán de usar plástico, lo que representa todos los marcos educativos del sistema educativo estatal, según un informe del sitio web de Globes.
Sin embargo, unos 600 jardines de infancia de la comunidad ultraortodoxa no se unirán inicialmente al programa, y la municipalidad dice que hay problemas “logísticos”.
Los ortodoxos se adhieren a estrictas leyes dietéticas, como la separación de la carne y los productos lácteos, así como los utensilios utilizados para preparar y comer los alimentos. Lavar en los jardines de infantes requeriría la instalación de dos fregaderos o lavaplatos en cada sitio, dijo la municipalidad.
Los jardines de infancia nacionales-religiosos también se adhieren a las normas dietéticas, pero no se ha dado ninguna explicación de la discrepancia.
Otra excepción significativa a la nueva política son los 120 jardines de infancia de la comunidad árabe que no cambiarán a utensilios reutilizables en la primera etapa del programa. La razón para que estos programas continúen utilizando los productos desechables no está clara.
El financiamiento inicial para crear un ambiente libre de plástico asciende a unos 6-7 millones de NIS (entre 1,73 y 2 millones de dólares) y el mantenimiento anual será de alrededor de 1 millón de NIS (290.000 dólares), según el informe.
La oficina del alcalde ya ha dejado de usar plástico y el plan es que todos los departamentos del ayuntamiento sigan su ejemplo.
Los jardines de infancia y las escuelas de la capital, a las que asisten 42.000 niños, utilizan unos 30 millones de artículos de plástico al año, según Globes.
La semana pasada, docenas de padres realizaron una manifestación fuera de la municipalidad exigiendo que se retiren los artículos de plástico de las instituciones educativas.