El domingo, Mohammed Al Thani, primer ministro de Qatar, calificó el Qatar-gate de campaña mediática con intenciones políticas.
El término Qatar-gate evoca el Watergate, pero carece de sustancia, según Al Thani.
Las acusaciones sobre la supuesta infiltración de Qatar en la Oficina del primer ministro israelí, con la contratación de asesores cercanos al líder de Israel, resultan infundadas y carentes de pruebas, afirmó el ministro.
Sobre las negociaciones para liberar rehenes, Al Thani destacó que los diálogos indirectos entre Hamás e Israel persisten. Qatar y Egipto median activamente en este proceso, sin interrupciones recientes.
La guerra debe terminar, pues no existen razones para prolongarla, subrayó el líder qatarí.
Hamás acepta liberar a todos los rehenes a cambio de prisioneros, pero impone condiciones que Israel considera inaceptables, según Al Thani.