El Ministerio de Salud decidió autorizar el alta de nuevas madres 12 horas después del parto, medida adoptada tras el inicio de la guerra entre Israel e Irán para disminuir la cantidad de pacientes hospitalizados. Esta disposición requiere la evaluación previa de un neonatólogo y un ginecólogo, quienes deben realizar exámenes tanto a la madre como al recién nacido para garantizar su seguridad.
Los datos médicos de los recién nacidos dados de alta se enviarán a las organizaciones de gestión de la salud para su seguimiento.
La Dra. Sharon Alroy Preiss, jefa de la división de salud pública del ministerio, afirmó: “El alta temprana de las madres y los recién nacidos de bajo riesgo se realiza con un enfoque en la continuidad de la atención, para asegurar que reciban todo el apoyo necesario”.