La Knéset aprobó el miércoles una resolución que declara el derecho natural, histórico y legal del Estado de Israel sobre la totalidad de la Tierra de Israel, con énfasis en Judea, Samaria y el Valle del Jordán. El texto obtuvo 71 votos a favor, mientras que los 13 diputados de partidos árabes y del partido Demócratas, encabezado por Yair Golan, votaron en contra. Los bloques Azul y Blanco y Yesh Atid no participaron.
El contenido de la resolución define estos territorios como parte inseparable de la patria judía desde una perspectiva histórica y cultural. Además, se menciona a ciudades como Hebrón y Siquem (Nablús) como parte integral de esa continuidad territorial. La redacción también vincula los ataques del 7 de octubre con la decisión de descartar la creación de un Estado palestino por considerarlo una amenaza existencial.
En el documento, la Knéset solicita al gobierno que avance con la aplicación de la soberanía israelí, incluidas la legislación, jurisdicción y administración en todas las zonas habitadas por judíos dentro de Judea, Samaria y el Valle del Jordán. Esta medida se presenta como una extensión formal del control estatal sobre esas regiones y sus estructuras locales.
Los impulsores de la iniciativa fueron los diputados Simcha Rothman, Oded Forer, Dan Illouz y Limor Son Har-Melech. La resolución exhorta a los gobiernos aliados de Israel a respaldar la implementación de la soberanía plena en esos territorios y a reconocer el derecho del pueblo judío a ejercer autoridad política y legal en esa área sin interferencias externas.
Yisrael Ganz, gobernador del Consejo Regional de Binyamin y presidente del Consejo Yesha, expresó: “Agradezco a los ministros y miembros de la Knéset tanto de la coalición como de la oposición que votaron a favor de esta importante propuesta para promover la soberanía israelí en Judea y Samaria”. Añadió que “el Consejo Yesha continuará trabajando incansablemente hasta que se aplique la soberanía israelí en Judea y Samaria».