Francesca Albanese, relatora especial de la ONU sobre los derechos palestinos, sancionada este mes por Estados Unidos por su presunta participación en una “guerra política y económica” contra Washington y Jerusalén, manifestó que las sanciones tendrán consecuencias directas sobre su vida privada y su ejercicio profesional.
Desde Roma, en declaraciones a The Associated Press, Albanese explicó que formar parte de la lista de personas sancionadas implica quedar excluida del sistema financiero estadounidense. “Es muy grave estar en la lista de personas sancionadas por Estados Unidos”, afirmó. Según detalló, esta condición impide utilizar tarjetas de crédito y mantener vínculos financieros con cualquier banco con sede en EE. UU.
Albanese criticó el uso político de estas medidas restrictivas. Aseguró que las sanciones, cuando se aplican en ese contexto, resultan “dañinas” y “peligrosas”. Añadió que la situación la afecta de forma concreta, debido a que su hija posee ciudadanía estadounidense y ella misma residió en EE. UU., donde mantiene algunos bienes.
“Por supuesto, me va a perjudicar”, declaró. Sin embargo, afirmó que sus decisiones se basaron en convicciones personales. “Hice todo lo que hice de buena fe y, sabiendo eso, mi compromiso con la justicia es más importante que los intereses personales”, concluyó.