Estados Unidos presentó al gobierno del Líbano una propuesta que contempla el desarme total de Hezbolá antes del 31 de diciembre de 2025, junto con el cese de las operaciones militares de Israel en territorio libanés y la retirada de tropas israelíes de cinco posiciones en el sur del país. La información proviene de una agenda del gabinete libanés a la que tuvo acceso Reuters.
El plan fue entregado por Tom Barrack, enviado del presidente Donald Trump, y se discute en una sesión del gabinete libanés. El documento contiene los lineamientos más específicos planteados hasta la fecha para desarmar a Hezbolá, organización respaldada por Irán. La agrupación no respondió a la propuesta ni emitió declaraciones. Tampoco se obtuvieron comentarios inmediatos del Departamento de Estado estadounidense ni de ministros libaneses.
El documento establece que la propuesta busca mantener y consolidar un acuerdo de alto el fuego negociado en noviembre entre Líbano e Israel. En el texto se señala que “la urgencia de esta propuesta se ve subrayada por el creciente número de quejas sobre violaciones israelíes del alto el fuego actual, incluidos los ataques aéreos y las operaciones transfronterizas, que corren el riesgo de desencadenar un colapso del frágil statu quo”.
La Fase 1 requiere que el gobierno libanés emita un decreto en un plazo de 15 días para comprometerse con el desarme completo de Hezbolá. Durante esta etapa, Israel detendría sus operaciones militares por tierra, aire y mar. El inicio de esta fase marca el comienzo formal del proceso propuesto.
En la Fase 2, el Líbano deberá iniciar la ejecución del plan de desarme en un periodo no mayor a 60 días. El gobierno aprobará un esquema de despliegue del ejército nacional con el objetivo de transferir el control total de las armas al Estado. Este documento incluirá los objetivos operativos del desarme. Paralelamente, Israel iniciará la retirada de algunas posiciones en el sur del Líbano y liberará prisioneros libaneses con la mediación del Comité Internacional de la Cruz Roja.
La Fase 3 prevé que Israel se retire de los últimos dos puntos de ocupación en un plazo máximo de 90 días. Además, se asignarán fondos para eliminar escombros y restaurar la infraestructura crítica, con vistas a la posterior reconstrucción del país.
Durante la Fase 4, fijada dentro de los 120 días, Hezbolá deberá entregar sus armas pesadas, incluidos misiles y drones. En este mismo periodo, Estados Unidos, Arabia Saudita, Francia, Qatar y otros países aliados organizarán una conferencia económica con el objetivo de apoyar la recuperación económica del Líbano y facilitar su reconstrucción. El evento buscará “implementar la visión del presidente Trump para el regreso del Líbano como un país próspero y viable”.