En la conflictiva región sureste de Irán, un enfrentamiento armado entre fuerzas de seguridad y atacantes se saldó con la muerte de un policía, según informaron agencias de noticias el sábado. Un grupo yihadista se atribuyó la responsabilidad del ataque.
El incidente tuvo lugar en la provincia de Sistán-Baluchistán, una de las zonas más empobrecidas del país, donde los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad, rebeldes de la minoría baluch, grupos extremistas suníes y traficantes de drogas son frecuentes.
“En un intercambio de disparos entre la policía de Iranshahr y hombres armados, un agente resultó herido y otro murió”, informó la agencia de noticias Fars, citando fuentes policiales. La agencia ISNA también reportó el violento enfrentamiento.
Sistán-Baluchistán alberga una numerosa población de etnia baluch, en su mayoría musulmanes suníes, en contraste con la mayoría chií del país. Según Fars, los agresores, heridos durante el tiroteo, huyeron del lugar y son objeto de una persecución policial.
Más tarde, el grupo yihadista suní Jaish al-Adl (Ejército de la Justicia) reivindicó el ataque a través de redes sociales. En los últimos años, este grupo, con base al otro lado de la frontera en Pakistán, se ha atribuido múltiples ataques en la región.
La semana pasada, Jaish al-Adl perpetró otro ataque en Sistán-Baluchistán que causó la muerte de un policía, según medios locales. El 26 de julio, al menos seis personas murieron en un asalto reivindicado por el mismo grupo contra un tribunal en la provincia.