Un hombre de 32 años con trastornos de salud mental fue detenido el domingo tras presuntamente haber rociado gasolina en una sinagoga de la ciudad de Zúrich, según informó la policía suiza.
Las primeras indagaciones de la policía municipal de Zúrich revelan que el ciudadano suizo “actuó por cuenta propia y no se han identificado motivos extremistas” detrás del incidente.
El sábado por la noche, el sospechoso vertió gasolina en la entrada de la sinagoga antes de ser sorprendido por un miembro del equipo de seguridad del templo judío. Tras huir del lugar a pie, la policía inició una búsqueda que culminó con su arresto en la madrugada del domingo.
La policía señaló que el hombre “parece estar mentalmente perturbado”.
Un informe publicado en marzo por dos entidades suizas de monitoreo del antisemitismo reveló que la violencia contra los judíos en Suiza se ha triplicado desde el inicio de la guerra de Gaza el 7 de octubre. Ese conflicto estalló cuando miles de terroristas de Hamás atacaron el sur de Israel, matando a casi 1.200 personas y secuestrando a 251.
Este informe se divulgó pocos días después de que un adolescente apuñalara gravemente a un hombre haredí en Zúrich. El atacante, presuntamente partidario del Estado Islámico y de origen tunecino, habría gritado “Muerte a todos los judíos” durante la agresión.