Betzalmo, una ONG israelí de derechos humanos, apeló al Fiscal General de Israel y al Ministro del Interior para que cancelen el permiso de residencia del fundador de BDS, Omar Barghouti.
Hace dos semanas, a Omar Barghouti se le negó la entrada a los Estados Unidos debido a su papel como fundador y presidente del movimiento que promueve el boicot, la desinversión y las sanciones (BDS) contra Israel.
En una carta fechada el 24 de abril de 2019, Betzalmo le preguntó al Ministro del Interior cómo es posible que EE. UU. impida que un líder del boicot ingrese a su territorio, mientras que el gobierno israelí continúa otorgándole un permiso de residencia que le permite recibir beneficios de el Estado de Israel.
“Una ley reciente autoriza al Ministro del Interior, con la aprobación del Fiscal General, a revocar la residencia de cualquier persona que dañe la seguridad del Estado o viole la lealtad al Estado, o ponga en peligro la paz pública”, señaló Betzalmo.
“Sin lugar a dudas, el liderazgo de Barghouti en el movimiento de boicot contra todos los ciudadanos del Estado de Israel perjudica gravemente al Estado de Israel y es una flagrante violación de la lealtad, así como una amenaza a la seguridad y defensa de Israel al presionar por un embargo de armas contra Israel”.
“Además, el movimiento BDS colabora con organizaciones terroristas, por lo que sin duda existe un vínculo indirecto entre el Sr. Barghouti y las organizaciones terroristas”.
El CEO de Betzalmo, Shai Glick, dijo:
“El Estado de Israel es un Estado democrático y liberal, pero debe, en nombre de la democracia y el liberalismo, defenderse a sí mismo y a sus ciudadanos. Una lucha decidida contra el boicot constituye una verdadera defensa de los ciudadanos del Estado de Israel”.
“No podemos exigir a nuestros aliados en el mundo que impidan la entrada de un activista del boicot y que impidan las conferencias de organizaciones de boicot, mientras permitimos que los principales activistas de BDS residan en Israel, otorgándoles beneficios estatales y una plataforma. Estamos seguros de que el Ministro del Interior y el Fiscal General actuarán con determinación y revocarán de inmediato la residencia del Sr. Barghouti para que pueda difundir su enseñanza tóxica solo fuera de Israel”.