El Ministro de Asuntos Estratégicos Gilad Erdan se ha puesto en contacto con sus homólogos en 10 países, entre ellos miembros de la Unión Europea (UE), para exigir la suspensión de la financiación de las organizaciones que apoyan el boicot contra Israel.
Entre los países en los que Erdan se puso en contacto con funcionarios se encontraban España, Bélgica, Estados Unidos, Noruega, Francia, Brasil, India, Alemania y el Reino Unido. En diciembre de 2018, el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea publicó un informe exhaustivo en el que se destacaba la falta de transparencia en la financiación de las organizaciones no gubernamentales por parte de la Unión Europea.
En esa ocasión, Erdan, que supervisa los esfuerzos de Israel para combatir el boicot, la anulación de contratos y la imposición de sanciones, pidió al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que garantizara que la financiación de la UE para las organizaciones palestinas que apoyan el movimiento BDS termine e impidiera futuras transferencias a organizaciones que apoyan el boicot contra Israel.
En marzo, el Consejo de Asuntos Exteriores de la UE decidió adoptar los principios establecidos en el informe de la Cámara de Cuentas de la UE.
En los últimos dos años, el Ministerio de Asuntos Estratégicos ha publicado dos informes sobre la financiación de la UE a organizaciones que abogan por un boicot a Israel. Según estos informes, la UE transfiere al menos 5 millones de euros (5.6 millones de dólares estadounidenses) anuales a estas organizaciones pro-BDS.
Otro logro significativo en los esfuerzos por reducir la financiación pública para estos grupos fue el cierre de la Secretaría de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario, con sede en Ramallah, que sirvió de mecanismo de financiación para el Gobierno europeo, con miembros como Suecia, los Países Bajos, Dinamarca y Suiza.
Aunque pudieron obtener financiación de los distintos Estados, el Ministerio de Asuntos Estratégicos considera que el cierre de la secretaría fue un duro golpe para los equipos de gestión de derechos digitales, ya que desde entonces han recibido menos fondos.
Alrededor de 350 participantes de 30 países llegarán a Israel la próxima semana para una conferencia internacional para coordinar la lucha contra la deslegitimación de Israel y la campaña BDS.
Según Erdan, “las organizaciones antisemitas de la BDS están disfrazadas de defensoras de los derechos humanos, lo que atrae millones de euros de los países occidentales. Las propias organizaciones de DRM han confirmado que nuestro trabajo es una de las principales amenazas a las que se enfrentan”.