Recientes hallazgos resaltan una diferencia notable en la percepción del antisemitismo entre mujeres y hombres judíos.
El panorama del antisemitismo en las universidades
Un estudio colaborativo entre Ipsos y Jewish on Campus denominado “Antisemitismo en los campus universitarios” ha arrojado luces sobre la percepción del antisemitismo en el ámbito académico.
Al indagar sobre la percepción de esta amenaza, el 49 % de las estudiantes judías considera que el antisemitismo es un problema en su universidad. Esta cifra contrasta con el 38 % de sus contrapartes masculinas que sienten lo mismo.
Si bien ambas cifras son alarmantes, es evidente una diferencia en la percepción entre ambos géneros.
El antisemitismo en distintas dimensiones de la vida universitaria
La encuesta se adentró más profundamente en las experiencias individuales. Al preguntar si el antisemitismo está presente en sus comunidades, el 33 % de las mujeres y el 22 % de los hombres judíos respondieron afirmativamente.
Al enfocarse en el alumnado, la diferencia persiste: el 35 % de las mujeres lo perciben, en comparación con el 27 % de los hombres.
En cuanto a la administración y facultad, el 18 % de las estudiantes judías ven antisemitismo, frente al 12 % y 13 % del total de estudiantes.
La percepción del antisemitismo en el gobierno estudiantil
El gobierno estudiantil no escapa a esta percepción. El 20 % de las mujeres judías consideran que prevalece el antisemitismo, mientras que el 16 % de los hombres comparte esta opinión.
Estos números refuerzan una discrepancia notable entre los géneros con relación a la percepción del antisemitismo en la vida universitaria.
La pregunta sigue en el aire: ¿A qué se debe esta diferencia?
Intersección de sexismo y antisemitismo: una explicación posible
Una de las teorías propuestas es que las estudiantes judías, al enfrentar tanto el antisemitismo como el sexismo, pueden tener una mayor conciencia de las manifestaciones antisemitas.
“Las estudiantes judías son más conscientes del antisemitismo que los estudiantes judíos varones debido a sus experiencias con la intersección de sexismo y antisemitismo”.
Además, podría existir una variedad de situaciones que las mujeres judías identifiquen como antisemitas, y que los hombres judíos simplemente no reconozcan como tales.