El lunes, un grupo de manifestantes antiisraelíes llevó a cabo una sentada en la sede de la federación francesa de fútbol, exigiendo la suspensión de un partido de la Liga de Naciones entre Francia e Israel, programado para finales de este mes.
Videos difundidos en redes sociales, así como en medios franceses, muestran a los manifestantes dentro de la sede de la federación en París, algunos acostados en el suelo, mientras otros sostenían pancartas con mensajes políticos y ondeaban banderas palestinas. Parte de los manifestantes también corearon: “No, no, no al partido Francia-Israel en el Stade de France”.
La federación de fútbol de Francia no emitió una respuesta inmediata ante la solicitud de comentarios realizada por The Associated Press. Sin embargo, los medios locales informaron que los manifestantes fueron desalojados de manera pacífica por las fuerzas policiales.
El mes pasado, las autoridades francesas confirmaron que el partido se celebraría con público presente en el estadio, esto luego de que Italia recibiera a Israel en el mismo torneo sin incidentes, pese a las preocupaciones previas por la seguridad.
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El partido del próximo 14 de noviembre en el Stade de France se llevará a cabo en medio de la guerra actual en Oriente Medio, que se inició el 7 de octubre del año pasado, cuando miles de terroristas liderados por Hamás atacaron el sur de Israel, matando a cerca de 1.200 personas y tomando 251 rehenes.
"Soldats colons, foutez le camp"
— Off Investigation (@Offinvestigatio) November 4, 2024
Plusieurs chants entonnés par des militants pro-palestiniens qui sont venus à la @FFF pour demander l'annulation de la prochaine rencontre de foot France-Israël. En cours à #Paris https://t.co/MCaGSkFXCQ pic.twitter.com/0aaXViyA8b
Desde el inicio de la guerra, Israel ha disputado todos sus encuentros como local en el estadio Boszik Arena de Budapest, además de algunos partidos como visitante, después de que la UEFA determinara que jugar en Israel representaba un riesgo demasiado alto.
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, conocido por mantener relaciones cercanas con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, ha promovido a Hungría como uno de los países más seguros de Europa para los judíos. Orbán también ha prohibido las protestas pro-Hamás, argumentando que estas manifestaciones suponen una amenaza para la seguridad pública.
El partido entre Israel e Italia del mes pasado fue el primer encuentro que Israel jugó fuera de Hungría este año, tras disputar un partido contra Bélgica en la Liga de Naciones. La Asociación Belga de Fútbol había rechazado acoger el encuentro alegando motivos de seguridad.