Un miembro judío de la junta de la Universidad de Michigan encontró el lunes su ventana rota y un grafiti antiisraelí en el automóvil de su esposa, siendo esta la tercera vez que enfrenta actos de vandalismo relacionados con la guerra entre Israel y Hamás.
Jordan Acker, abogado y demócrata de Huntington Woods, Michigan, explicó en Instagram que él y su familia escucharon dos objetos lanzados contra la ventana frontal de su hogar durante la madrugada. El automóvil de su esposa fue marcado con un triángulo rojo invertido, un símbolo empleado por Hamás en sus vídeos de propaganda, además de las frases “DESINVERSIÓN” y “PALESTINA LIBRE”.
En la publicación, Acker calificó el acto como algo “propio del Ku Klux Klan” y reafirmó su compromiso con la universidad y sus votantes. “Como siempre hacemos en esta gran nación, cuando nos enfrentamos al terrorismo, no permitiré que el miedo gane”, escribió. Añadió un llamado a la comunidad para repudiar públicamente estos actos y apoyar a las fuerzas del orden en su investigación.
Por su parte, la Universidad de Michigan emitió un comunicado condenando enérgicamente el incidente, calificándolo como un “acto claro de intimidación antisemita”. La institución destacó que este tipo de acciones son inaceptables y pidió unidad contra la intolerancia y la violencia.
El vandalismo ocurrió poco después de que el consejo estudiantil amenazara con suspender la financiación de grupos estudiantiles hasta que la universidad desinvirtiera en Israel. Sin embargo, los regentes han rechazado dicha propuesta, y el presidente estudiantil que lideraba esta iniciativa fue destituido en el último mes.
El campus, ubicado en un estado con importantes comunidades judías y árabes estadounidenses, ha sido escenario de intensos debates y activismo tras el ataque del 7 de octubre de 2023 que desencadenó la guerra entre Israel y Hamás.
Acker ya había sido víctima de actos similares. En mayo, un manifestante llegó a su casa con una lista de demandas que incluían la desinversión en Israel. Ese mismo día, la presidenta del consejo de regentes, Sarah Hubbard, también fue blanco de actos vandálicos. En junio, la oficina legal de Acker fue marcada con mensajes ofensivos y consignas pro desinversión.
Tras este último ataque, Acker expresó al periódico Michigan Daily que los responsables deben enfrentar cargos apropiados. “Podemos estar en desacuerdo sobre políticas, pero cometer delitos nunca es aceptable”, declaró. Además, reiteró su apoyo a las autoridades para que los responsables sean procesados con todo el peso de la ley, incluso a nivel federal.