El viernes por la mañana, activistas del Foro Luchando por Cada Dunam llegaron al Altar de Josué en el Monte Ebal para realizar sus oraciones matutinas y descubrieron que nuevamente los árabes de la Autoridad Palestina habían dañado o removido varias capas de piedras del altar.
Según los activistas, en el lugar se hallaron numerosos excrementos de ovejas, lo que sugiere que la zona histórica es frecuentada por pastores árabes, quienes podrían estar vinculados con la destrucción del altar. Informaron que los daños ocurrieron en dos áreas distintas del altar, y que algunas de las piedras antiguas no solo fueron derribadas, sino también quebradas en pedazos.