Según un estudio publicado en la revista Journal of Archaeological Science: Reports, se ha descubierto cerámica de todo el imperio Wari con el mismo pigmento negro utilizado en los rituales.
Antes que los Inka, el imperio Wari gobernó partes de Perú desde el año 600 d.C. hasta el 1050 d.C.
Según investigaciones anteriores, el imperio empleaba alcohol de molle para mantener el control sobre sus súbditos. Según Heritage Daily, se cree que también se consumían alucinógenos durante las fiestas comunales. Estas sustancias podrían haber contribuido a las visitas demoníacas y la brujería que algunos viajeros españoles afirmaron haber presenciado en Perú.
Los científicos
Dado que no empleaban la escritura, Muro Ynoán, autor correspondiente del estudio e investigador asociado y antiguo científico postdoctoral en el Museo Field de Chicago, sostiene que la cultura material, como la cerámica, habría sido una herramienta crucial para comunicar ideas sociales y políticas. “Estas cosas habrían tenido un tremendo efecto visual”.
Aunque los materiales utilizados para fabricar el pigmento negro varían según la región, todos incluyen mangase.
A la llegada de los wari, algunos de los yacimientos, sobre todo los del norte de Perú, empleaban una receta diferente para el negro, utilizando minerales ricos en hierro y calcio. Sin embargo, cuando los wari se hicieron con el control, adoptaron las recetas a base de manganeso.
Ynoán añadió que, tras entrar en el imperio Wari, la gente empezó a utilizar esta cocina a base de manganeso. Esto puede haber indicado algún tipo de control de calidad de la cerámica y simplificado a los académicos el cálculo de la influencia de los wari.
Según Ynoán, “el color negro de la cerámica está ligado a los antepasados, a la noche, al paso del tiempo”. Probablemente, el tono fue crucial durante la época wari para imponer una determinada filosofía wari a las comunidades conquistadas.