El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, reaccionó el sábado a los mortíferos ataques con cohetes e infiltraciones de Hamás en Israel, expresando su solidaridad con los civiles palestinos y aprovechando la ocasión para lanzar críticas a Israel. Mientras tanto, en varias ciudades de Judea y Samaria, los palestinos celebraron en las calles.
A primera hora del sábado, Hamás lanzó un ataque masivo por sorpresa contra Israel, disparando miles de cohetes y llevando a cabo un gran asalto de infiltración en varias comunidades fronterizas israelíes. Al menos 40 israelíes murieron y cientos resultaron heridos. También se teme que Hamás haya capturado a decenas de israelíes y los haya llevado de vuelta a Gaza.
Las FDI lanzaron una serie de ataques aéreos contra Hamás en Gaza en respuesta y convocaron una movilización masiva de reservas.
Abbas presidió en Ramala una reunión de emergencia de la dirección de la Autoridad Palestina y, según la agencia oficial de noticias Wafa, “dio instrucciones para proporcionar protección al pueblo palestino, subrayando el derecho del pueblo palestino a defenderse contra el terrorismo de los colonos y las fuerzas de ocupación”.
Abbas también “dio instrucciones para proporcionar todo lo necesario para reforzar la resistencia y la firmeza del pueblo palestino frente a los crímenes cometidos por la ocupación israelí y las bandas de colonos”.
El movimiento Al Fatah de Abbas, que controla la Autoridad Palestina, que gobierna parte de Judea y Samaria, mantiene una tensa relación con Hamás desde que este último tomó el control de la franja de Gaza en 2007 y expulsó a todos los funcionarios de Al Fatah del enclave costero.
El ministro de Sanidad de la AP en Ramala, May al-Kayla, declaró el estado de emergencia en todos los hospitales de Judea y Samaria, afirmando que están preparados para recibir a los heridos de la franja de Gaza “como consecuencia de la agresión lanzada por la ocupación”.
Hubo celebraciones callejeras en varias ciudades de Judea y Samaria, con imágenes de islamistas armados del grupo terrorista Guarida del León repartiendo caramelos a los transeúntes en la Ciudad Vieja de Naplusa para celebrar el asalto.
Egipto, en un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, advirtió de los graves peligros de la actual escalada, “tras una serie de ataques contra ciudades palestinas”. [sic]
Egipto, que a menudo actúa como mediador entre Hamás e Israel, afirmó que la escalada podría afectar negativamente a los futuros esfuerzos por lograr un alto el fuego, y pidió que se actuara con la máxima moderación para evitar herir a civiles.
Gran parte de la comunidad internacional expresó su total condena del ataque de Hamás.