LA HAYA, Países Bajos – Los árabes de la Autoridad Palestina se han unido a la convención mundial para detener la proliferación de armas tóxicas, anunció el miércoles la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, OPAQ.
“El Estado de Palestina entregó el 17 de mayo de 2018 su instrumento de adhesión a la Convención sobre armas químicas”, dijo la OPAQ, con sede en La Haya, en un comunicado.
“Esto significa que Palestina se convertirá en el 193° Estado en unirse a la CWC” cuando entre en vigor el 16 de junio de 2018, dijo un funcionario de la OPAQ a la AFP.
El organismo de control de armas químicas dijo que su secretaría técnica recibió una notificación del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, la semana pasada para informarle que la Autoridad Palestina ha “entregado su instrumento de adhesión”.
El ente árabe creado en 1994 y autodenominado Autoridad Palestina, está haciendo campaña para la creación de su propio Estado, y han intensificado una campaña en los últimos años para ganar el reconocimiento de las organizaciones internacionales.
Israel, sin embargo, se opone con vehemencia a estos intentos y ha llevado a cabo intensos esfuerzos diplomáticos para detenerlos.
En 2012, las Naciones Unidas elevaron a la Autoridad Palestina a un Estado observador no miembro. La Interpol, la Corte Penal Internacional, la UNESCO y ahora la OPAQ se refieren a los territorios bajo control de la Autoridad Palestina como un Estado.
De acuerdo con el Ministerio de Relaciones Exteriores de la AP, se han unido o suscrito a más de 50 organizaciones y acuerdos.
Solo cuatro países, incluido Israel, aún no se han inscrito en el CWC, que tiene como objetivo eliminar una categoría completa de armas de destrucción masiva. Prohíbe el desarrollo, la producción, la adquisición y el almacenamiento de armas químicas por parte de sus Estados miembros.

El anuncio se produce tras una visita de funcionarios de la Autoridad Palestina a la Corte Penal Internacional, con sede en La Haya, donde instaron a su fiscal a investigar lo que llamaron “los crímenes de guerra cometidos por Israel contra los palestinos”.
El ministro de Relaciones Exteriores de la Autoridad Palestina, Riyad al-Malki, dijo que la denuncia “busca una investigación de las políticas israelíes en Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén Este”, desde que la AP se unió a la CPI en junio de 2014.
Israel rechazó la solicitud como “cínica” y “absurda”.
En respuesta a la medida del martes en la CPI, Israel dijo que tomó una “visión severa” de la solicitud de la AP. Acusó al ente árabe de incitación violenta contra Israel y de explotar a mujeres y niños como escudos humanos.
Jerusalén también dijo que la CPI no tenía jurisdicción en el caso porque Israel no es miembro de la corte.