ARGELES, Argelia – Las facciones palestinas firmaron el jueves en Argelia un acuerdo de reconciliación, comprometiéndose a celebrar elecciones el próximo mes de octubre, en su último intento de poner fin a una ruptura que dura ya más de 15 años.
El acuerdo fue firmado por una figura destacada del partido Al Fatah del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, y por el jefe del grupo terrorista Hamás, que gobierna Gaza.
Pero el propio Abbas, presidente de la Autoridad Palestina desde 2005, no estuvo presente.
“Firmamos este acuerdo para deshacernos del cáncer maligno de la división que ha entrado en el cuerpo palestino”, dijo el jefe de la delegación de Fatah, Azzam al-Ahmed.
“Somos optimistas de que se aplicará y no se quedará en tinta sobre el papel”.
El jefe de Hamás, Ismail Haniyeh, dijo que era “un día de alegría en Palestina y Argelia y para los que aman la causa palestina, pero un día de tristeza para la entidad sionista”, en referencia al Estado de Israel.
Al Fatah y Hamás están enfrentados desde las elecciones de 2006, que ganó Hamás pero que nunca fueron reconocidas por la comunidad internacional.
Al año siguiente, el movimiento islamista se hizo con el control de la Franja de Gaza dando comienzo a años de división, mientras que Al Fatah administraba las zonas de Judea y Samaria gestionadas por los palestinos.
Las primeras elecciones desde la división debían celebrarse el año pasado, pero fueron canceladas por Abbas.
El presidente argelino Abdelaziz Tebboune, que medió en el acuerdo del jueves, señaló en un discurso en la ceremonia de la firma en el Palacio de las Naciones de la capital argelina que Yasser Arafat había utilizado el mismo edificio para anunciar la independencia del Estado de Palestina en 1988.
El acuerdo se firmó con pompa y ceremonia en presencia de embajadores extranjeros y una banda militar que tocó los himnos nacionales de Palestina y Argelia.
Sin embargo, el acuerdo del jueves es una especie de golpe diplomático para Argelia, semanas antes de que acoja una cumbre de la Liga Árabe.
El país norteafricano, uno de los principales exportadores de gas, ha recibido en los últimos meses un flujo constante de líderes europeos en su intento de aumentar tanto las ventas de energía como su influencia diplomática, especialmente en medio de las renovadas tensiones con su principal rival, Marruecos.
Según la “Declaración de Argel” del jueves, firmada también por otras importantes facciones palestinas, se celebrarán elecciones a la presidencia y al Consejo Legislativo Palestino, que actúa como parlamento de los árabes palestinos en Judea y Samaria y Gaza.
También estipula la celebración de elecciones para el Consejo Nacional Palestino, un parlamento para los palestinos, incluidos los millones de habitantes de la diáspora. Argelia aceptó acoger el Consejo.
Se había hablado de formar un gobierno de unidad, pero no se mencionó en el documento final.