En los últimos dos años, 58 mujeres palestinas fueron asesinadas en incidentes de violencia doméstica. Las organizaciones de derechos de las mujeres palestinas reprendieron a la Autoridad Palestina por no redactar leyes que podrían haber evitado los crímenes, informó el jueves Palestinian Media Watch.
La ONG Centro de Asistencia y Asesoramiento Jurídico para Mujeres (WCLAC por sus siglas en inglés), descubrió que 21 mujeres palestinas fueron asesinadas en 2019 y 37 en 2020, lo que supone un aumento total del 176%, informó el 3 de julio el diario Al-Hayat Al-Jadid de la AP.
Los crímenes de honor y la violencia doméstica en la sociedad árabe se han convertido en un problema común y constante. Aunque la Autoridad Palestina ha estado más atenta a estos casos, no se han tomado medidas legales o legislativas para prevenir los abusos.
“Las leyes desempeñan un papel fundamental en la protección de los sectores sociales, del individuo, de sus posesiones y de sus creencias, y en particular de las mujeres. Las leyes también aumentan la conciencia de la sociedad respecto a los derechos, y también constituyen un elemento disuasorio y aportan seguridad y estabilidad. Por lo tanto, la ratificación de la ley para defender a la familia de la violencia limitará la violencia contra las mujeres y las protegerá así del peligro de asesinato”, dijo Sana’a Shbeita, secretaria de la Asociación de Comités de Actividades de la Mujer en Nablus.
“A falta de una ley que defienda a la familia contra la violencia, los hombres de la familia seguirán haciendo lo que quieran con las mujeres”. añadió Tahrir Al-A’araj, director general de la Iniciativa Palestina para la Promoción del Diálogo Global y la Democracia.
No solo no hay leyes que protejan a las mujeres de la violencia, sino que en 2019, el imán de la mezquita de Al-Aqsa y jefe del Consejo Supremo Musulmán, el jeque Ikrima Sabri, emitió una fatwa (sentencia religiosa) que prohíbe a las mujeres musulmanas palestinas presentar quejas a las autoridades israelíes por el comportamiento de sus maridos.
El muftí de la Autoridad Palestina, el jeque Muhammad Hussein, apoyó la prohibición, diciendo: “Es mejor dejar el asunto a la gente buena y a las figuras fiables [de nuestra sociedad] para tratar el tema”.
Además, en diciembre de 2018, en medio de una campaña de la AP para prevenir la violencia contra las mujeres, el juez supremo de la Shari’ah de la AP y asesor de Mahmoud Abbas en asuntos religiosos e islámicos, Mahmoud Al-Habbash, dijo a los televidentes que los hombres están autorizados a golpear a las mujeres, que hacerlo era por su propio bien.
Bader Al-A’araj, profesor de ciencias sociales de la Universidad de Bir Zeit, explicó que la tolerancia de la violencia doméstica existe porque el maltratador es alguien cercano a la mujer “su pariente, marido o amante”.
La directora del Departamento de Seguimiento de la Legislación del ICHR, Khadija Zahran, añadió que el concepto de “violación conyugal” ni siquiera se reconoce en la cultura palestina porque el cuerpo de la mujer es “un derecho permitido al hombre”.