El líder republicano Mike Johnson inicia su mandato presentando una resolución que muestra apoyo a Israel en su lucha contra los ataques de Hamás, reforzando la postura estadounidense.
El recién nombrado presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, comenzó oficialmente sus funciones promoviendo una medida decisiva. En su primera acción, Johnson introdujo una resolución enfatizando el soporte incondicional de Estados Unidos hacia Israel en su conflicto con el grupo terrorista Hamás. Esta iniciativa se presenta como una respuesta directa a la reciente ola de violencia iniciada por Hamás el 7 de octubre.
La proposición, aunque no obligatoria, exige de manera explícita que Hamás cese sus agresiones y libere a los rehenes capturados. Se detalla que aproximadamente 2.500 combatientes de Hamás invadieron el sur de Israel, resultando en la muerte de cerca de 1.400 individuos, predominantemente civiles, y la captura de 224 rehenes en la Franja de Gaza.
Israel ha contraatacado con operaciones significativas en Gaza, con planes de una ofensiva terrestre exhaustiva. A pesar del apoyo militar prometido por la administración de Joe Biden, la resolución presentada no asigna fondos específicos para las operaciones militares de Israel. La votación culminó con 412 votos a favor y 10 en contra, destacando una minoría de miembros del partido demócrata en desacuerdo, principalmente debido a la omisión de referencias a las bajas palestinas.
Además, se informa que Israel mantiene su objetivo de neutralizar las amenazas terroristas, procurando minimizar las bajas civiles. Sin embargo, las estadísticas de fatalidades proporcionadas por las autoridades de Gaza, controladas por Hamás, permanecen sin corroboración independiente. Incluyen incidentes como el del 17 de octubre, donde un proyectil defectuoso de la Yihad Islámica impactó en un hospital.
En el contexto político interno, el presidente Joe Biden instó a la acción legislativa inmediata, subrayando la necesidad de responsabilidad colectiva para enfrentar desafíos financieros urgentes y asistir no solo a Israel sino también a Ucrania. El mandatario enfatizó la premura de estos asuntos, especialmente considerando el inminente riesgo de un cese de actividades gubernamentales si no se aprueban los fondos necesarios antes del 17 de noviembre.
Es notable que Johnson asume este rol sin haber tenido previamente experiencia presidiendo comisiones o en posiciones de alto nivel. A pesar de esto, se anticipa que desempeñará un papel crucial, guiando los esfuerzos del congreso, actualmente dividido, en debates futuros, especialmente en temas sensibles como los fondos destinados a Ucrania e Israel.
En relación con Israel, Johnson participó en 2020 en un viaje organizado por la Fundación 12Tribe Films, como reportó Haaretz. Durante su estancia, interactuó con figuras prominentes del Foro Político Kohelet y visitó sitios significativos como el Monte del Templo, acompañado por Yehudah Glick, conocido defensor de los derechos de oración judíos en dicho lugar.
Con su posición oficialmente establecida, Johnson expresó su determinación por reactivar la función legislativa, proclamando, “La Cámara del Pueblo vuelve a funcionar”. Este cambio de liderazgo también marca el final de un ciclo de disputas dentro del Partido Republicano, surgido tras la salida de Kevin McCarthy. Aunque Johnson no fue la primera opción para el puesto, su perfil equilibrado y profunda religiosidad han contribuido a una base de apoyo estable dentro de su partido, incluyendo al expresidente Donald Trump.
Trump, en una declaración reciente, respaldó a Johnson, afirmando: “Creo que va a ser un orador fantástico”. Estas palabras se dieron en medio de circunstancias judiciales actuales de Trump en Nueva York, relacionadas con acusaciones de fraude empresarial, resaltando su figura como probable candidato para las elecciones de 2024.