El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, afirma que ya no puede hablar con el primer ministro Benjamin Netanyahu a la luz de los bombardeos contra Hamás en Gaza, informan los medios turcos.
“Netanyahu ya no es alguien con quien podamos hablar. Le hemos borrado y tirado a la basura”, dice Erdogan a los periodistas en un vuelo de regreso de una cumbre en Kazajstán.
No obstante, Erdogan añade que su ministro de Asuntos Exteriores y su jefe de los servicios de inteligencia seguirán hablando con “la parte israelí”, así como con Hamás y otros grupos palestinos.
Desde que Israel lanzó su ataque contra Hamás tras el atentado del 7 de octubre en el que murieron unas 1.400 personas, la mayoría civiles, la retórica de Erdogan contra la operación ha sido cada vez más crítica, poniendo fin a los esfuerzos de Turquía e Israel por reconciliarse tras más de una década de relaciones mayoritariamente hostiles.
Erdogan, en declaraciones recogidas por la agencia estatal de noticias Anadolu y otros medios turcos, también reitera la posibilidad de que Turquía sea garante de cualquier futuro acuerdo de paz a largo plazo entre Israel y Palestina.
“Si Grecia puede ser un país garante, Inglaterra puede ser un país garante y Turquía es un país garante en Chipre, ¿por qué no puede haber una estructura similar en Gaza?”, dijo el presidente, en referencia a un tratado de 1960 sobre la isla del Mediterráneo oriental.
Añadió que Ankara estaba “tomando iniciativas y desarrollando fórmulas” para encontrar la paz.
Criticando el apoyo internacional a Israel, Erdogan afirma que “todo Occidente, especialmente Estados Unidos, está actualmente del lado de Israel” y que la gente “no debe esperar una actitud justa” de la Unión Europea respecto a Gaza.