En una nueva señal de calentamiento de los lazos entre Israel y Arabia Saudita, a partir de ahora se permitirá oficialmente a los ciudadanos del Estado judío viajar al vecino reino árabe bajo ciertas circunstancias, anunció el domingo el gobierno.
El ministro del Interior Aryeh Deri firmó una orden que permite a los israelíes ir al reino para participar en reuniones de negocios o para buscar inversiones, siempre que tengan una invitación de un organismo oficial y se hayan ocupado de los trámites necesarios para entrar en el país.
También permite formalmente a los ciudadanos musulmanes de Israel viajar a la ciudad saudí de La Meca para realizar el hajj o peregrinación religiosa de la Umrah. Los peregrinos israelíes suelen viajar para el hajj con documentos temporales jordanos.
La declaración del ministerio dijo que a los israelíes se les permitiría viajar a Arabia Saudita hasta nueve días, pero un funcionario aclaró más tarde que los permisos serían por 90 días.
Hasta ahora, la ley israelí prohibía a los ciudadanos viajar a muchos países árabes, incluyendo Arabia Saudita, sin el permiso expreso del ministro del interior, y las visitas cada vez más comunes de los hombres de negocios israelíes se realizaban generalmente en secreto.
Sin embargo, no está claro si el nuevo orden permitirá de hecho que los israelíes visiten Arabia Saudita, ya que Riad generalmente prohíbe a los ciudadanos israelíes visitar el país y no ha hecho un anuncio que suavice esas restricciones.
Las relaciones clandestinas se han incrementado en los últimos años entre Jerusalén y Riad, enfocadas principalmente en cuestiones de seguridad, especialmente dada la enemistad mutua con Irán.
En julio, el primer ministro Benjamin Netanyahu recibió en su oficina de Jerusalén a un ciudadano de Arabia Saudita, el blogger Mohammed Saud, un día después de que el hombre fuera atacado por palestinos enfadados con sus opiniones pro-israelíes. Saud, conocido como un partidario acérrimo del primer ministro, fue invitado a Israel por el Ministerio de Asuntos Exteriores como parte de una delegación de blogueros y periodistas de varios países árabes.
En septiembre, Arabia Saudita atacó duramente el anuncio de Netanyahu de que se anexionaría el Valle del Jordán y otras partes de Judea y Samaria, y convocó una reunión de emergencia de la Organización de Cooperación Islámica para condenar la medida prevista.