La Fiscal de la Corte Penal Internacional, Fatou Bensouda, informó a la Sala de Cuestiones Preliminares de la Corte Penal Internacional que se puede proceder a una investigación de crímenes de guerra contra los israelíes a pesar de la continua aplicación de los Acuerdos de Oslo.
Israel y sus aliados han afirmado que los Acuerdos de Oslo impiden que la Autoridad Palestina busque la participación de la CPI en una posible cuestión penal y también que aspire a la condición de Estado sin un acuerdo entre las partes. La decisión de Bensouda, dada a conocer el lunes, fue un rechazo al argumento legal de Israel.
Bensouda expresó también su preocupación por el impacto de la aplicación de la soberanía israelí en el combustible del conflicto entre Israel y la Autoridad Palestina y dijo que cualquier “anexión” por parte de Israel a cualquier parte de Judea y Samaria no tendría validez jurídica.
La declaración del jefe fiscal de la Corte Penal Internacional se produjo en respuesta a una solicitud del 27 de mayo de la Sala de Cuestiones Preliminares de la Corte Penal Internacional, en la se pedía que aclarara la situación de los Acuerdos de Oslo y sus repercusiones en una investigación de crímenes de guerra contra Israel.
La CPI pidió a la Autoridad Palestina que explicara si los Acuerdos de Oslo siguen siendo legalmente vinculantes. La solicitud se emitió después de que el presidente de la AP, Mahmoud Abbas, manifestara el 19 de mayo que la AP ya no se encontraba vinculada a los Acuerdos de Oslo debido a la intención de Israel de aplicar su soberanía partes de Judea y Samaria.
En respuesta a esta pregunta, la AP informó que la declaración de Abbas del 19 de mayo no formaba parte del registro legal en el caso de crímenes de guerra relacionados a Israel.
La AP explicó también que su posición era que la Corte Penal Internacional podía investigar a los israelíes por crímenes de guerra incluso si los Acuerdos de Oslo seguían vigentes, lo que implicaba claramente que la AP no había abandonado el proceso de Oslo en el plano jurídico formal, a pesar de las declaraciones que afirmaban lo contrario. Si Israel extendiera su soberanía a Judea y Samaria, esto cancelaría oficialmente los Acuerdos de Oslo, añadió la AP.
Ahora que Bensouda ha respondido, queda por ver si Israel contestará, y si lo hace, qué posición tomará.
Israel tiene hasta el 24 de junio para responder, pero también puede optar por no hacerlo para no reconocer la investigación de la CPI.
En general, las respuestas que den las partes podrían tener repercusiones en relación a si se va a presentar el caso de crímenes de guerra contra los israelíes por la guerra de Gaza del 2014, la empresa de poblados y el conflicto fronterizo de Gaza del 2018 al 2019.
En un escrito presentado por la República Checa en apoyo de Israel, el argumento fue que los Acuerdos de Oslo otorgan a Israel jurisdicción exclusiva sobre cuestiones penales en la Judea y Samaria relacionadas con Israel, lo que demuestra que no existe un “Estado de Palestina” para enviar una causa a la Corte Penal Internacional.
Por lo general, solo un Estado puede remitir un caso a la CPI.
En respuesta a estos argumentos, Bensouda, quien apoya la apertura de una investigación completa de crímenes de guerra de Israel y Hamás, afirmó que: “La práctica de los Estados demuestra que las disposiciones de Oslo que derogan el derecho del pueblo palestino a la libre determinación no se aplican”.
En otras palabras, Bensouda y la AP habían argumentado anteriormente que incluso si los Acuerdos de Oslo no eran anulados, la CPI puede seguir adelante con el caso de los crímenes de guerra.
Pero es un área de la ley vaga y arriesgada, y un posible argumento ganador para Israel que podría hacer fracasar el caso de los crímenes de guerra antes de que llegue a los interrogatorios, por no hablar de las acusaciones.
Por el contrario, si los Acuerdos de Oslo no se aplican, la AP puede decir que Israel ha perdido una de sus mejores defensas por la participación de la CPI.
Hay muchas otras posibles defensas israelíes, pero los Acuerdos de Oslo siempre se han considerado las más importantes porque la Autridad Palestina entró voluntariamente al acuerdo en el decenio de 1990, mucho después de la Guerra de los Seis Días.
El Ministerio de Relaciones Exteriores ha guardado silencio sobre el tema hasta la fecha.
Bensouda manifestó su intención de avanzar contra Israel y Hamás el 20 de diciembre, pero solicitó el respaldo de la Sala de Cuestiones Preliminares de la CPI. Incluso antes de este último acontecimiento, no estaba claro cuándo la CPI emitiría su fallo.