La embajada de Israel en la Santa Sede presentó una queja el lunes tras las acusaciones de un laureado yemení con el Nobel, quien calificó de “genocidio” las acciones de Israel en Gaza en un acto del Vaticano.
La representación diplomática expresó su “indignación y conmoción” ante las declaraciones de Tawakkul Karman, activista de derechos humanos, que se llevaron a cabo el sábado en la noche durante una conferencia de la Fundación Fratelli Tutti, iniciativa del Papa Francisco.
Karman, galardonada con el Premio Nobel de la Paz en 2011 por su influencia en las protestas de la Primavera Árabe, declaró en el vestíbulo de la Basílica de San Pedro: “El mundo permanece callado ante el genocidio y la limpieza étnica contra el pueblo palestino en Gaza”.
El lunes, la embajada de Israel publicó una carta abierta en X rechazando como “falsedades” las acusaciones de Karman. “El evento estuvo plagado de un discurso abiertamente antisemita”, indicó la carta. “Nos decepciona que tales declaraciones se realizaran sin que nadie asumiera la responsabilidad moral de interrumpir este despropósito”, añadió la misiva.
Karman fue aplaudida vigorosamente por la audiencia, integrada por otros ganadores del Nobel, políticos y dignatarios eclesiásticos, tras mencionar a Gaza. El Papa Francisco no estuvo presente.
Desde el comienzo de la guerra en Gaza, las tensiones entre el Vaticano e Israel se han intensificado, con acusaciones por parte de grupos judíos hacia el papa Francisco por no reconocer la invasión israelí del enclave palestino como un acto de autodefensa, tras los ataques de Hamás el 7 de octubre que resultaron en la muerte de aproximadamente 1.200 personas, en su mayoría civiles, y el secuestro de 252.
En marzo, la embajada israelí criticó al cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, por describir la actuación del ejército israelí en Gaza como una “carnicería”. Inicialmente, calificaron sus comentarios de “deplorables”, pero luego aclararon que fue un error de traducción y que la palabra correcta era “lamentable”.
El Ministerio de Salud de Gaza, administrado por Hamás, sostiene que Israel ha causado la muerte de más de 35.000 palestinos en la guerra, una cifra no verificable de forma independiente que se cree incluye tanto a terroristas de Hamás como a civiles, algunos muertos por fallos en el lanzamiento de cohetes por parte del propio grupo.
Las Fuerzas de Defensa de Israel informan que han eliminado a más de 15.000 terroristas en Gaza, sumado a cerca de 1.000 que murieron dentro de Israel el 7 de octubre y días subsecuentes.
Desde el 7 de octubre, el ejército ha perdido 620 soldados, 272 de los cuales murieron durante la incursión terrestre en Gaza.