El Jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el teniente general Aviv Kohavi, volará a Washington el sábado por la noche, un mes después de que se fijara su viaje para discutir sobre la creciente amenaza iraní y otros desafíos regionales.
Durante su viaje, que será el primero como máximo responsable militar de Israel, se espera que se reúna con sus homólogos estadounidenses en un intento de persuadirles para que no vuelvan a participar en el acuerdo nuclear iraní.
Inicialmente, Kohavi tenía previsto reunirse con el Secretario de Defensa, Lloyd Austin, el Asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, el Jefe del Estado Mayor Conjunto, general Mark Milley, el jefe del Mando Central de EE.UU., general Kenneth McKenzie Jr. y el jefe del Mando de Operaciones Especiales de EE.UU., general Richard D. Clark.
El jefe del Estado Mayor también hablará del deterioro de la situación en el Líbano, del atrincheramiento iraní en Siria y de la operación “Guardián de los Muros”, que le llevó a posponer su viaje en mayo.
Será el primer viaje de un funcionario israelí con el primer ministro Naftali Bennett al frente del gobierno; Kohavi se reunirá con él antes de su viaje.
Los dos han colaborado estrechamente durante la etapa de Kohavi como ministro de Defensa y ambos son considerados halcones en la cuestión iraní.
Hace dos semanas, el ministro de Defensa, Benny Gantz, viajó a Washington y se reunió con los mismos funcionarios para tratar los mismos temas. En las reuniones, expuso la necesidad de cambiar la política en la Franja de Gaza, la necesidad de reforzar la alianza de los moderados, así como el fortalecimiento de la Autoridad Palestina, y la cuestión de la devolución de los soldados de las FDI caídos y los ciudadanos retenidos por Hamás en la Franja de Gaza como un valor moral y humanitario.
El ministro de Defensa también expuso la necesidad de profundizar en la supervisión de Irán y detener también su agresión regional, señalando que él e Israel tendrán que preparar una opción militar.
Antes de la reunión con Austin, Gantz subrayó la necesidad de detener el programa nuclear de Irán.
Detener a Irán “es sin duda una necesidad estratégica compartida por Estados Unidos, Europa, los países de Oriente Medio e Israel, y también por el pueblo de Irán”, dijo, y añadió que “por supuesto, dado el alcance de la amenaza, Israel debe asegurarse siempre de que tiene la capacidad de protegerse”.