El viaje del presidente estadounidense Joe Biden a Israel se ha fijado provisionalmente para los días 14 y 15 de julio, según confirmó el domingo un funcionario israelí a The Times of Israel.
Funcionarios de Biden afirman que se está preparando una gira por Oriente Medio, con una parada en Arabia Saudita, pero aún no se ha concretado la fecha. En un principio estaba previsto que tuviera lugar a finales de junio, pero se retrasó a julio debido a lo que, según un funcionario estadounidense, eran problemas de agenda.
La Casa Blanca no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
Gran parte del viaje aún se está planificando, pero incluirá las tradicionales reuniones bilaterales con el primer ministro Naftali Bennett, el presidente Isaac Herzog, el ministro de Asuntos Exteriores Yair Lapid y el ministro de Defensa Benny Gantz en Israel, y con el presidente de la Autoridad Palestina Mahmud Abbas en Judea y Samaria, dijo el funcionario israelí. El funcionario añadió que esta última reunión está prevista en Belén y que también se espera que Biden visite el monumento al Holocausto Yad Vashem y el este de Jerusalén.
Pero la Casa Blanca parece estar prestando más atención al viaje de Biden a Arabia Saudita, que tendrá lugar la misma semana que la visita a Israel.
El funcionario israelí dijo que el retraso del viaje se debía a que la Casa Blanca aún estaba debatiendo ciertos aspectos de la escala saudí, que es políticamente sensible, ya que Biden había dicho como parte de su campaña presidencial que trataría al reino como un Estado “paria” por el asesinato del periodista Jamal Khashoggi. Poco después de asumir el cargo, Biden dio a conocer el informe de inteligencia que decía que el príncipe heredero saudí Mohammed Bin Salman había autorizado el asesinato de Khashoggi.
Biden también redujo el apoyo de Estados Unidos a la campaña aérea liderada por Arabia Saudita en Yemen en medio de la repulsa por las víctimas civiles.
NBC News, que informó por primera vez del retraso, dijo que el gobierno de Biden está elaborando planes para celebrar una cumbre en julio con los miembros del Consejo de Cooperación del Golfo, que está formado por Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Kuwait, Omán y Qatar.
La administración quiere reforzar sus alianzas en Oriente Medio y presionar a Riad para que aumente la producción de petróleo, dado el aumento de los precios de la energía en todo el mundo.
Las especulaciones sobre el próximo viaje se intensificaron en los últimos días, con algunos informes que vinculan el viaje a las conversaciones mediadas por EE.UU. entre Egipto y Arabia Saudita que podrían incluir pasos hacia la normalización con Israel.
Una delegación estadounidense encabezada por la subsecretaria de Estado Barbara Leaf se encuentra actualmente en la región para reunirse con funcionarios israelíes y palestinos, antes de la visita de Biden.