Durante la visita del presidente estadounidense, Joe Biden, a la región esta semana, se anunciarán avances tangibles en la incipiente relación entre Israel y Arabia Saudita, dijo un alto funcionario israelí a última hora del martes.
“Es una relación delicada, es muy frágil, novedosa en muchos aspectos”, dijo el funcionario durante una sesión informativa de Zoom a los periodistas. “Les pido que sean pacientes durante unos días más antes de que podamos sacar a la luz lo que realmente será la materialización inmediata de este proceso”.
El funcionario dijo que Israel estaba operando como si “los pasos que estamos dando ahora serán sólo el comienzo, el inicio del proceso de normalización entre los países”.
Israel apoya la distensión en las tensas relaciones entre Washington y Riad desde que Biden asumió el cargo, subrayó el funcionario. “Es importante para EEUU, es importante para Israel e importante para la seguridad de la región”.
Biden tiene previsto aterrizar el miércoles en el aeropuerto Ben Gurion para una visita que incluirá Israel, antes de partir el viernes hacia Arabia Saudita.
El asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, restó importancia a las esperanzas de un avance en una sesión informativa a los periodistas en la Casa Blanca el lunes.
“Con respecto a Israel y Arabia Saudita, no me voy a adelantar al intenso trabajo que se realizará en el transcurso de este viaje”, dijo Sullivan. “La normalización de cualquier tipo sería un proceso largo”.
El viceministro de Asuntos Exteriores, Idan Roll, dijo el lunes que la normalización con Riad se produciría por etapas, a diferencia del anuncio por sorpresa de los Acuerdos de Abraham, por los que Israel forjó lazos con los Emiratos Árabes Unidos y Bahréin en 2020. Sin embargo, Roll expresó su esperanza de que el viaje de Biden venga acompañado de algún progreso.
Plataforma de cooperación
Israel y EE.UU. publicarán el jueves una declaración conjunta sobre el futuro de la relación bilateral, dijo el alto funcionario israelí.
El documento, titulado “Declaración de Jerusalén sobre la asociación estratégica entre Estados Unidos e Israel”, es una “declaración histórica… que muestra la naturaleza única de lo que tenemos entre nuestros países”.
“Es una plataforma para la cooperación en los próximos años”, dijo el funcionario, añadiendo que es una “fuerte expresión de la vitalidad e indispensabilidad de las relaciones entre Israel y Estados Unidos”.
La declaración se hará pública el jueves después de la reunión entre el primer ministro Yair Lapid y Biden.
El documento aborda el programa nuclear iraní, comprometiendo a ambos países a “utilizar todos los elementos del poder nacional” para impedir que Irán consiga un arma nuclear.
También subraya el compromiso inquebrantable de Estados Unidos con la seguridad y la ventaja cualitativa de Israel.
En cuanto a la visita más amplia, el funcionario calificó el viaje de “oportunidad sin precedentes para cambiar la dinámica en Oriente Medio”.
“Soplan vientos muy fuertes que dicen que EE.UU. está comprometido a trabajar con Israel y sus socios y amigos en la región para tratar de transformar la región”.
La visita se centrará en lo que ambos países comparten, dijo el funcionario.
Se espera que Irán salga a relucir en todas las reuniones entre Biden y los líderes israelíes.
“Estamos agradecidos y apreciamos el enfoque que la administración ha adoptado en los últimos meses”, dijo el funcionario, señalando la decisión de no retirar al Cuerpo de Guardias Revolucionarias de Irán de la lista de grupos terroristas extranjeros de EE.UU., algo que Irán había exigido en las negociaciones del acuerdo nuclear.
Tras aterrizar el miércoles, Biden recorrerá varios sistemas de seguridad israelíes con el ministro de Defensa, Benny Gantz; este acto iba a celebrarse inicialmente en la base de las fuerzas aéreas de Palmachim, en el centro de Israel, pero ahora también se celebrará en el aeropuerto de Ben Gurion. La exposición incluirá una batería de defensa antimisiles Cúpula de Hierro, en un guiño a los esfuerzos de Estados Unidos por conceder a Israel 500 millones de dólares adicionales en baterías de repuesto para el sistema tras la guerra de Gaza del año pasado.
El presidente también anunciará su aprobación para que el complejo militar-industrial estadounidense inicie conversaciones con sus homólogos israelíes sobre la compra de la Cúpula de Hierro, dijo un alto funcionario estadounidense a The Times of Israel.
Tras la visita a las armas, Biden tiene previsto dirigirse al museo y monumento al Holocausto Yad Vashem, en Jerusalén, para realizar una breve visita.
El jueves por la mañana, Biden mantendrá una reunión con Lapid, tras la cual ambos harán declaraciones a la prensa. También asistirá a parte de esta reunión el predecesor de Lapid, Bennett, que se reunió con Biden en dos ocasiones durante su año como primer ministro.
No se espera que ninguna de las dos partes haga un anuncio importante. Está previsto que Biden se reserve la mayor parte de sus comentarios sobre el conflicto palestino-israelí para su reunión del viernes con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas.
A continuación, Biden se reunirá con Herzog, seguido de una breve sesión con el líder de la oposición Benjamín Netanyahu, que se añadió al programa el mes pasado para evitar la percepción de que EE.UU. estaba tomando partido antes de las elecciones israelíes del 1 de noviembre.
El presidente tiene previsto terminar la jornada asistiendo a la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos Judíos Maccabiah, junto a Lapid y Herzog.