El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha decidido posponer cualquier intento de normalización con Arabia Saudita hasta después de las elecciones presidenciales en Estados Unidos en noviembre, según informó el Canal 12.
Netanyahu tomó esta decisión en un contexto de rápidos cambios políticos en Estados Unidos, considerando que podría ser beneficioso esperar el resultado electoral, particularmente si el candidato republicano y ex presidente Donald Trump es reelegido.
Esta decisión, según el informe, tiene implicaciones significativas, incluyendo un posible acuerdo de alto el fuego con rehenes.
La normalización con Arabia Saudita podría haber funcionado como una “red de seguridad” para Netanyahu: en caso de que su coalición de derecha se fracturara debido a desacuerdos sobre un acuerdo relacionado con Gaza, la normalización le habría proporcionado una ventaja política, reforzando su posición electoral y permitiéndole asegurar un legado histórico.
El informe, sin fuentes específicas, surge apenas una semana después de que un funcionario israelí dijera a periodistas en Washington, DC, que un acuerdo de normalización entre Israel y Arabia Saudita aún era posible antes de las elecciones presidenciales de noviembre.
Además, se mencionó que Netanyahu discutió este tema con el presidente estadounidense Joe Biden durante su reciente encuentro en la Casa Blanca.