El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, instó el jueves a Israel a reconsiderar el cierre de su embajada en Asunción, calificándola de una respuesta “exagerada” a la decisión del país sudamericano de trasladar su embajada a Tel Aviv.
La disputa diplomática comenzó en mayo cuando el presidente saliente Horacio Cartes autorizó el traslado de la embajada paraguaya en Israel desde Tel Aviv a Jerusalén, como lo habían hecho Estados Unidos y Guatemala. La movida complació a Israel y Washington, pero enfureció a los árabes que se hacen llamar palestinos y sus partidarios.
Abdo Benítez, quien ganó las elecciones paraguayas en abril pero aún no había asumido el cargo cuando Cartes anunció el cambio en uno de sus últimos actos como presidente, dijo que revisaría la decisión.
El miércoles, dijo que lo revertiría y movería la embajada de regreso a Tel Aviv, una decisión aplaudida por los líderes palestinos.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ordenó de inmediato el cierre de la Embajada de Israel en Asunción.
“Lamento la decisión de Israel. La reacción de cerrar la embajada fue un poco exagerada e instamos a las autoridades a reconsiderarla”, dijo Abdo Benítez en una conferencia de prensa en Itapúa, a 273 millas (440 kilómetros) al sur de Asunción.
Dijo que Paraguay “se apegaría a la ley internacional y a la resolución de las Naciones Unidas que todavía la considera un territorio en conflicto” entre Israel y los palestinos.
Mientras hablaba Abdo Benítez, varios partidarios de Israel protestaron frente a su residencia de Asunción en contra de su decisión de revertir la medida de Jerusalén.

El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, habló con Abdo Benítez el miércoles y “alentó encarecidamente” al líder de Paraguay a cumplir con su compromiso anterior de trasladar la embajada a Jerusalén, según un comunicado de la Casa Blanca.
La decisión de Cartes de trasladar la embajada a Jerusalén había sido criticada en Paraguay, pero fue celebrada por Israel.
Al anunciar la medida el miércoles, el canciller paraguayo, Luis Alberto Castiglioni, dijo en una conferencia de prensa que esperaba que “los amigos de Israel no se molesten” por la reversión de su nación y expresó la esperanza de “excelentes lazos de amistad y cooperación” con “los estados de Israel y Palestina”.

Castiglioni describió el movimiento de Cartes como “unilateral, visceral y sin justificación”.
“Uno de los componentes más complejos del conflicto (entre Israel y los palestinos) es el estatus de Jerusalén”, dijo Castiglioni, y Paraguay cree que debería negociarse entre las partes involucradas, una posición que aún ocupa la mayoría de las naciones.
Los palestinos quieren que el sector oriental de Jerusalén sea la capital de su Estado esperado, mientras que Israel ve a la ciudad entera como su capital eterna e indivisa. Israel capturó el este de Jerusalén en la Guerra de los Seis Días de 1967 junto con la Franja de Gaza y Cisjordania, territorios que los palestinos quieren para su futuro Estado.
La mayoría de los países han mantenido sus embajadas en Tel Aviv para no prejuzgar el resultado de las conversaciones de paz entre Israel y los palestinos.
La embajada de Israel en Asunción estuvo cerrada de 2003 a 2016 por limitaciones presupuestarias. Según un informe del jueves en Yedioth Ahronoth, los diplomáticos israelíes consideraron innecesaria la apertura de la embajada en Paraguay.