Israel se ha comprometido a mantener a la administración Biden al tanto de los principales acuerdos con China y reconsideraría esos acuerdos si Estados Unidos plantea su oposición, informó Haaretz.
Tanto la administración Biden como la administración Trump han planteado su preocupación por los crecientes lazos entre Israel y China, ya que las relaciones de esta última con Estados Unidos y los países europeos se han agriado.
El asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, planteó el asunto en su reunión con el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Yair Lapid, durante una visita a Israel en diciembre y en una reunión anterior en Washington, según el informe de Haaretz.
Estados Unidos todavía no ha hecho demandas claras a Israel sobre el asunto, pero los funcionarios israelíes han comenzado a discutir la política del país hacia China, según el informe.
China e Israel se han acercado en los últimos años, sobre todo en materia de tecnología e innovación. El informe citaba fuentes no identificadas que decían que Israel estaba adoptando un enfoque de “negocios como siempre” con China, ya que sigue atrapado entre dos poderosos estados en medio de una guerra comercial en curso.
Sin embargo, Israel ha seguido alineándose diplomáticamente con China: en noviembre, el presidente israelí, Isaac Herzog, hizo una llamada sin precedentes al presidente chino, Xi Jinping, para discutir el programa nuclear de Irán. Y en octubre, Israel se abstuvo de firmar una declaración conjunta de las Naciones Unidas en la que se planteaba la preocupación por el trato de China a los musulmanes uigures, la minoría turca que sufre persecución en el noroeste de China.