Un importante gasoducto que va de Rusia a Alemania se cierra para realizar el mantenimiento anual, en medio de la preocupación alemana por la posibilidad de que Rusia no reanude el flujo de gas como estaba previsto.
El gasoducto Nord Stream 1, la principal fuente de gas ruso para Alemania, estará fuera de servicio hasta el 21 de julio por trabajos rutinarios que, según el operador, incluyen “pruebas de elementos mecánicos y sistemas de automatización”. Los datos de la operadora muestran que el flujo de gas ha bajado como estaba previsto esta mañana.
Las autoridades alemanas desconfían de las intenciones de Rusia, sobre todo después de que la rusa Gazprom redujera el mes pasado el flujo de gas a través del Nord Stream 1 en un 60 %. Gazprom citó problemas técnicos relacionados con una turbina de gas que alimenta una estación de compresión que su socio Siemens Energy envió a Canadá para su revisión y que no pudo ser devuelta debido a las sanciones impuestas por la invasión rusa de Ucrania.
Canadá dijo el fin de semana que permitiría la entrega de la pieza a Alemania, citando las “dificultades muy significativas” que sufriría la economía alemana sin un suministro de gas suficiente.
Los políticos alemanes han desestimado la explicación técnica de Rusia para la reducción del flujo de gas a través de Nord Stream 1 el mes pasado, diciendo que la decisión era una táctica política para sembrar la incertidumbre y hacer subir los precios.
El vicecanciller alemán, Robert Habeck, ha dicho que sospecha que Rusia puede citar “algún pequeño detalle técnico” como razón para no reanudar las entregas de gas a través del gasoducto tras el mantenimiento de este mes.