Con la apertura de operaciones en Asia, los precios del petróleo han comenzado a descender, aliviando a los operadores tras los recientes ataques de Israel contra objetivos militares en Irán, los cuales no afectaron a las instalaciones petroleras del país.
El crudo Brent del Mar del Norte, con entrega en diciembre, se redujo en un 4,02%, alcanzando los 72,99 dólares por barril. Por su parte, el West Texas Intermediate sufrió una caída del 4,17%, cotizándose a 68,79 dólares.
Luego del ataque con misiles balísticos de Irán contra Israel el 1 de octubre, los precios del petróleo experimentaron un aumento significativo. Sin embargo, estos comenzaron a descender después de haber alcanzado su punto más alto el 7 de octubre, cuando se hizo evidente que Israel probablemente limitaría sus represalias para evitar una escalada del conflicto.