Shell publicó el jueves sus perspectivas anuales sobre el GNL y predijo que la mayor demanda europea de gas natural licuado aumentará la rivalidad con Asia en un futuro próximo y hará que Europa domine el comercio de GNL a largo plazo.
Shell, la mayor comercializadora de GNL del mundo, ofreció un pronóstico optimista sobre el combustible hasta 2040, señalando que las importaciones de GNL en los países europeos, incluido el Reino Unido, aumentaron un 60 % el año pasado, hasta 121 millones de toneladas.
El volumen de comercio internacional de GNL fue de 396 millones de toneladas en 2022, 16 millones más que en 2021.
La caída de las importaciones de China en 15 millones de toneladas (19 %) debido a la política de cero-COVID y una reducción significativa de las importaciones de GNL del sur de Asia debido a los altos costos permitieron el repunte de las importaciones europeas en 2022, dijo Shell.
Sin embargo, en 2022, las importaciones europeas de gas por gasoducto procedentes de Rusia cayeron un 53 % en comparación con el año anterior.
El vicepresidente ejecutivo de Marketing Energético de Shell, Steve Hill, declaró en un comunicado: “La guerra en Ucrania ha tenido consecuencias de gran alcance para la seguridad energética en todo el mundo y ha producido alteraciones fundamentales en el mercado que se espera que perjudiquen al negocio mundial del GNL a largo plazo”.
Aunque el supermajor cree que el GNL tiene potencial para convertirse en el principal proveedor de energía de Europa para hacer frente a los problemas de seguridad energética, se espera que China dé gradualmente una mayor flexibilidad al mercado mundial de GNL.
El mercado mundial de GNL se mantendrá tenso hasta mediados de la década de 2020, según el supermajor, con Europa y Asia compitiendo por los escasos nuevos suministros de GNL.
Para 2025-2026, el mercado tendrá acceso a nuevos suministros, principalmente de Catar y Estados Unidos. Según Shell, estos dos grandes productores de GNL representarán más del 80 % de la producción adicional de GNL para 2030.
Sin nuevas inversiones en suministro adicional, el supergrande advirtió de la posibilidad de que se produzca otro desfase entre la oferta y la demanda a finales de la década de 2020.