El Consejo de Consumidores de Israel envió una carta a la compañía aérea El Al para exigirle que solucione de inmediato una amplia gama de quejas relativas a su servicio de atención al cliente, informa The Times of Israel.
Según el Canal 12 de noticias, el organismo de control detalló una amplia gama de casos de personas que no pueden ponerse en contacto con los representantes de la compañía o recibir reembolsos de billetes de avión, lo que advirtió que podría constituir un engaño a los clientes, un delito según la legislación israelí.
“El consejo ha recibido muchas quejas contra El Al, alegando reclamaciones similares o idénticas, que plantean serias y flagrantes preocupaciones por la violación de la Ley de Protección del Consumidor”, decía la carta.
“En la mayoría de las quejas, los consumidores se quejan de la falta de disponibilidad de todas las plataformas de contacto de la compañía (WhatsApp, correo electrónico, fax, correo ordinario, Facebook, teléfono) y de la imposibilidad de conseguir un representante de servicio de la compañía”.
Las quejas detalladas en la carta incluían la espera al teléfono durante siete horas hasta que alguien respondía; la imposibilidad de los consumidores de canjear bonos, mover vuelos o cambiar cualquier otra cosa debido a problemas técnicos en la página web de El Al; la cancelación de vuelos sin previo aviso ni compensaciones, y la afirmación por parte de la aerolínea de haber emitido un reembolso, pero sin que la persona reciba el dinero.
El consejo también dijo que algunas de las quejas sin respuesta se remontan a 2020.
La aerolínea dijo en una respuesta que examinará todas las quejas de la carta y que está trabajando para mejorar su servicio. Pero El Al mantuvo que muchos de los problemas “se produjeron mientras la aerolínea y el resto del mundo se enfrentaban a las consecuencias de la pandemia del COVID-19 y a las consiguientes restricciones en los viajes”.
Cientos de vuelos de El Al fueron cancelados en los primeros días de la pandemia, cuando la aerolínea cerró sus operaciones durante varios meses mientras Israel cerraba en gran medida sus cielos.
La aerolínea estaba en dificultades financieras antes de que la pandemia llegara y supusiera un duro golpe para los viajes internacionales. El Al y otras compañías aéreas han exigido un rescate del gobierno para ayudar a cubrir las pérdidas causadas por la decisión de cerrar los cielos y prohibir los turistas.