Un informe encargado por la empresa energética Drax Group ha revelado que el Reino Unido podría enfrentar una crisis energética a finales de la década de 2020 debido al cierre de centrales eléctricas. Según el estudio de la consultora Baringa, se espera que la demanda máxima de electricidad en el Reino Unido aumente en 4 GW para 2027, mientras que el cierre de centrales nucleares, centrales térmicas de carbón y plantas de energía con gas antiguo eliminará hasta 6,3 GW de capacidad segura de la red.
El informe indica que la capacidad disponible, que contribuye a la seguridad energética del país, se reducirá del 93% al 85% en los momentos de máxima demanda, lo que aumentará el riesgo de déficit de suministro eléctrico.
La creciente necesidad de energías renovables
El Reino Unido experimentará un aumento de la capacidad intermitente debido al aumento de la energía eólica y solar. Sin embargo, se necesitará una generación estable que sirva de respaldo en los momentos de máxima demanda. Este invierno, por ejemplo, National Grid ha solicitado varias veces capacidad de generación con carbón para tenerla lista en caso de que la demanda aumente en los días y noches más fríos del invierno.
El informe de Baringa también sugiere que el sistema eléctrico del Reino Unido tendrá que recurrir a otras formas de capacidad, como los interconectores eléctricos y la generación renovable intermitente, como la eólica o la solar, para compensar el 15% de diferencia en los momentos de máxima demanda.
La central de biomasa de Drax en Yorkshire es el mayor proveedor de energía despachable del sistema eléctrico británico y una de las pocas fuentes renovables de suministro seguro, según la empresa. Drax también ha instado al Gobierno británico a apoyar su proyecto de captura y almacenamiento de carbono antes de poder comprometerse con un proyecto de 2 450 millones de dólares (2 000 millones de libras) para instalar tecnología de bioenergía con captura y almacenamiento de carbono (BECCS) en su central.
El papel del gobierno británico
El informe de Baringa para Drax sugiere que el gobierno británico tendrá que tomar medidas para asegurar el suministro eléctrico del país a medida que se cierran las centrales eléctricas. El gobierno también tendrá que apoyar la implementación de tecnologías de captura y almacenamiento de carbono y tecnologías de almacenamiento de energía a gran escala para garantizar un suministro eléctrico seguro y sostenible a largo plazo.
En resumen, el Reino Unido se enfrenta a una crisis energética en la próxima década debido al cierre de centrales eléctricas, lo que reducirá la capacidad disponible y aumentará el riesgo de déficit de suministro eléctrico. Se necesitará una generación estable para respaldar la energía intermitente renovable y se requerirá una mayor inversión en tecnologías de captación y almacenamiento de carbono y tecnologías de almacenamiento de energía a gran escala. La situación requiere del gobierno una respuesta rápida y efectiva para garantizar la seguridad energética del país y la transición hacia un sistema energético sostenible a largo plazo.