El Ministerio de Defensa de Israel lanzará en las próximas semanas una licitación multimillonaria para adquirir 20,000 drones fabricados en Israel, según informó una fuente cercana al asunto a Globes.
Esta compra, que se realizará en varias entregas a lo largo de cinco años, incluirá drones de asalto, vigilancia e inteligencia. Varias empresas israelíes, como Dronix, Xtend, Robotican, Tehiru, Heven Drones y CopterPix, se espera que participen en la licitación.
Este movimiento marca un cambio en la estrategia de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), que recientemente han preferido drones chinos de fabricantes como DJI y Autel, a pesar de que ambas empresas están en la lista negra del Departamento de Defensa de EE. UU.
La urgencia por adquirir drones chinos surgió ante la necesidad inmediata de utilizarlos en la guerra urbana en Gaza, donde la preparación de las FDI era insuficiente. Los drones chinos, donados en gran número a las FDI, han sido ampliamente utilizados en la guerra.
Sin embargo, la dependencia de drones chinos presenta riesgos para la seguridad nacional, según advertencias de EE. UU., debido a que las FDI utilizan equipos fabricados por compañías controladas por el gobierno chino.
Además, esta dependencia aumenta la vulnerabilidad de Israel a un posible embargo chino, considerando que China es aliada de países como Irán, Rusia, Qatar y Hamás. Los drones chinos también enfrentan dificultades operativas en el frente norte de Israel, donde Hezbolá utiliza el sistema Aeroscope para detectar y localizar estos dispositivos.
La industria israelí de drones, aunque aún no está preparada para producir decenas de miles de unidades, es crucial para la independencia tecnológica y la capacidad de Israel de producir drones adaptados a sus necesidades estratégicas.
El suministro de drones israelíes se espera a medio o largo plazo, lo que dará tiempo a las empresas locales para establecer líneas de producción y contratar personal técnico especializado.
El precio de los drones sigue siendo un desafío. Las FDI han establecido un rango de precio entre 10,000 y 20,000 NIS por dron, un umbral que muchas empresas israelíes consideran insuficiente debido a los altos costos de materias primas y componentes, como los sensores térmicos.
Esto reduce la posibilidad de que gigantes tecnológicos como Elbit Systems y Rafael participen en la licitación, ya que sus drones, como el Spike Firefly de Rafael y el Thor de Elbit, exceden significativamente el límite de precio establecido.
Xtend, con sede en Tel Aviv, es una de las empresas que probablemente participará en la licitación. Xtend ya suministra drones a las FDI y produce el Wolverine, un UAS multimisión capaz de portar cámaras térmicas y armas. Robotican, que fabrica el dron Goshawk, también podría presentar una oferta. Tehiru, Dronix, Heven Drones y CopterPix son otras empresas que se espera participen en la licitación con sus respectivos modelos de drones.
Hasta el momento, el portavoz de las FDI no ha emitido comentarios sobre la licitación.