Durante la noche del 5 de junio, las Fuerzas de Defensa de Israel llevaron a cabo una operación en la ciudad de Jenin, en Judea y Samaria, durante la cual se produjeron “disparos masivos” contra los soldados de las FDI.
El reportaje de la CNN sobre la operación, del que son coautores Abeer Salman y Kareem Damanhoury, es un ejemplo de mala praxis periodística al citar selectivamente las declaraciones de las FDI de forma que se oculta el hecho de que se estaba produciendo un tiroteo.
El artículo de la CNN describe la operación de esta manera: “Las FDI dijeron que ‘se instigó un disturbio violento’ durante la operación y que ‘los alborotadores quemaron neumáticos, lanzaron piedras, cócteles molotov y artefactos explosivos contra las fuerzas, que respondieron con medios de dispersión de disturbios’. Los 16 palestinos heridos lo fueron por balas y metralla, según el Ministerio de Sanidad palestino, y todos fueron trasladados al hospital de Jenín”.
Esta descripción omite otra declaración clave hecha por las FDI. Como informó The Times of Israel: “Las FDI dijeron que estallaron enfrentamientos, incluyendo ‘disparos masivos dirigidos a las tropas’, en medio de la operación de demolición. Según los informes de los medios de comunicación palestinos, un hombre murió y varios otros resultaron heridos en un intercambio de disparos con las tropas israelíes. El ejército dijo que las tropas habían devuelto el fuego a los pistoleros y a los alborotadores que les lanzaron explosivos”. (énfasis añadido).
Si uno leyera sólo el informe de la CNN, no tendría ninguna idea de que los soldados de las FDI estaban participando en un tiroteo, en lugar de en un simple disturbio.
Cabe destacar que las FDI no eran la única fuente en la que la CNN podría haber confiado para obtener esta información. Como informó The Jerusalem Post, “los vídeos publicados por los medios de comunicación palestinos mostraban a hombres armados palestinos intercambiando disparos con soldados israelíes”. Algunos de esos vídeos pueden encontrarse en las redes sociales.
La historia de la CNN borró atrozmente este contexto y citó selectivamente a las FDI para reforzar su descripción engañosa de los acontecimientos que subestima dramáticamente el nivel de violencia que las fuerzas israelíes encontraron durante la operación.
El hecho de no mencionar el intenso tiroteo es un ejemplo particularmente agudo de la incapacidad de los medios de comunicación occidentales para informar sobre la creciente violencia e inestabilidad palestina en partes de Judea y Samaria donde la Autoridad Palestina, en virtud de los Acuerdos de Oslo, se supone que debe mantener el orden y la seguridad.
Como explicó recientemente Khaled Abu Toameh, del Jerusalem Post “En primer lugar, la Autoridad Palestina no parece ser capaz -o estar dispuesta- a enfrentarse a los pistoleros, que gozan del apoyo del público palestino”.
“En segundo lugar, los pistoleros, especialmente los de las regiones de Jenin y Nablus, están siendo armados y financiados por la Yihad Islámica Palestina y Hamás”, señaló Toameh. “Los líderes de los dos grupos respaldados por Irán no han ocultado su deseo de empujar a los palestinos de Judea y Samaria hacia una confrontación armada con Israel. Varios pistoleros de Al Fatah afiliados a la facción gobernante de Al Fatah, encabezada por Mahmud Abbas, no tienen ningún problema en cooperar con la Yihad Islámica y Hamás, siempre que los dos grupos estén dispuestos a ofrecerles dinero y armas”.
“Hamás y la Yihad Islámica esperan que el aumento de los ataques a tiros y los enfrentamientos armados contra los colonos y los soldados de las FDI contribuyan también a socavar el control de la Autoridad Palestina sobre Judea y Samaria”, concluyó.
El hecho de no informar sobre estos acontecimientos y tendencias contribuye a una comprensión incompleta de los acontecimientos en Judea y Samaria. Al informar únicamente sobre las operaciones de las FDI, destinadas en gran medida a detener a presuntos terroristas, sin explicar el contexto en el que se desarrollan estas operaciones, el público se queda con sólo una parte de la historia.