Según The Wall Street Journal, que cita a personas con conocimiento de los servicios de inteligencia que rodearon el atentado terrorista del 7 de octubre, la Fuerza Quds de élite del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica entrenó a unos 500 combatientes de Hamás y de la Yihad Islámica Palestina en las semanas previas al atentado.
Algunos de los terroristas se lanzaron en paracaídas sobre Israel, mientras que otros lo hicieron en motocicletas, un medio de transporte utilizado habitualmente por las organizaciones paramilitares iraníes, pero no por Hamás hasta el momento, según WSJ.
Aunque funcionarios estadounidenses, israelíes y de Hamás coinciden en que Irán apoya a Hamás desde hace mucho tiempo, todos insisten en que no hay pruebas de que Teherán participara directamente en el asalto del 7 de octubre, a pesar de un informe publicado en The Wall Street Journal a principios de este mes que sugería lo contrario.
El portavoz de las FDI, Daniel Hagari, declaró el miércoles que Irán proporcionó a Hamás “ayuda directa” en forma de dinero, entrenamiento, armamento y conocimientos tecnológicos antes del conflicto. Según los informes, Irán sigue proporcionando inteligencia a Hamás.