Una denuncia por abuso sexual hecha por la hija de una funcionaria pública israelí contra sus dos padres ha provocado una ola de críticas internacionales hacia el gobierno de Israel, que no ha emitido declaraciones oficiales sobre el caso.
El medio estatal iraní PressTV expuso la contradicción entre las acusaciones del gobierno israelí contra Hamás y el silencio ante las imputaciones que recaen sobre un funcionario. “Israel afirmó que Hamás cometió agresiones sexuales contra mujeres, pero ahora un funcionario público israelí está acusado de lo mismo”, publicó.
Titulares similares han aparecido en distintos medios de comunicación internacionales, sobre todo en la prensa árabe, después de que la menor presentara una denuncia policial. En ella afirmó: “Fui gravemente agredida sexualmente”.
El canal turco TRT, principal medio estatal del país, señaló la inacción del gobierno israelí: “Hay un silencio total por parte del gobierno israelí, que no ha abordado el aspecto ético del caso”.
A diferencia del enfoque de algunos medios extranjeros que presentan las acusaciones como concluyentes, la Policía de Israel informó que no se han hallado pruebas que respalden las declaraciones de la menor. Una fuente oficial consultada por The Jerusalem Post calificó la denuncia como “delicada y compleja” tras tomarle declaración.
Fuentes israelíes han evitado difundir detalles del caso, debido a una orden de censura que limita la cobertura mediática. Según reportes policiales, hasta el momento no existe evidencia que confirme las acusaciones.
Un video difundido por la propia denunciante incluye una narración detallada de lo ocurrido.
A pesar de que los medios israelíes no han emitido el video completo, ni han revelado información personal de la denunciante por razones legales y por la falta de pruebas, las imágenes circularon ampliamente en medios internacionales.
Algunos sectores han intentado aprovechar las acusaciones para establecer paralelismos con los crímenes sexuales atribuidos a Hamás el 7 de octubre. Dichos crímenes han sido verificados por organismos internacionales.
Varios sitios de noticias árabes criticaron la postura oficial: “Israel hizo afirmaciones infundadas de que Hamás cometió crímenes sexuales durante el 7 de octubre”.
“Y ahora, cuando hay supuestas pruebas de que un funcionario público israelí cometió tales crímenes, el gobierno israelí permanece oficialmente en silencio”.