Estados Unidos está intentando unir a sus aliados árabes en torno a una estrategia para el período postguerra en Gaza, que contempla el retorno de la Autoridad Palestina (AP) al gobierno del enclave.
Sin embargo, el gobierno de Biden reconoce la necesidad de una fuerza internacional que gestione y asegure Gaza durante un período provisional, hasta que una AP revitalizada esté lista para asumir el control.
Funcionarios de Biden han propuesto que países árabes contribuyan con tropas y fondos para la reconstrucción y rehabilitación de Gaza después de la guerra. Aunque la idea no ha sido totalmente aceptada por los aliados árabes debido a la falta de interés de Israel en trabajar hacia una solución de dos estados con la AP, sigue en discusión.
Jordania ha rechazado públicamente las propuestas. El ministro de Asuntos Exteriores jordano, Ayman Safadi, criticó los esfuerzos de EE. UU. por discutir planes de posguerra mientras continúan los combates. “No habrá tropas árabes en Gaza. Ninguna. No vamos a ser vistos como el enemigo”, declaró Safadi en una conferencia en Yemen.
Un portavoz del Departamento de Estado de EE. UU. evitó responder directamente a las críticas de Safadi, pero afirmó que EE. UU. sigue trabajando con socios regionales, incluida Jordania, para abordar el conflicto en Gaza y proteger la vida de civiles.
El secretario de Estado, Antony Blinken subrayó la importancia de centrar la gobernanza postcrisis en Gaza en las voces y aspiraciones del pueblo palestino. Estados Unidos es el mayor proveedor de ayuda bilateral a Jordania, con más de 1.650 millones de dólares en 2021.