El Cairo está intentando convencer a Hamás para que asista a una cumbre programada para el próximo jueves en Doha, después de que el grupo terrorista anunciara que no planea enviar negociadores.
Según una fuente egipcia citada por el diario libanés Al-Akhbar, la participación de Hamás sería clave para contrarrestar las acusaciones de Israel, que sostiene que el grupo está obstaculizando los esfuerzos para lograr un alto el fuego.
Además, Egipto estaría presionando para que se establezca una pausa temporal en los combates, permitiendo un respiro que facilite la extensión del alto el fuego.
En paralelo, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, discutió con su homólogo turco, Hakan Fidan, la relevancia de que Hamás participe en la cumbre.
Aunque el comunicado de Estados Unidos no mencionó explícitamente que Blinken instara a Fidan a persuadir a Hamás, la implicación es clara, dado que Turquía mantiene una relación amistosa con los líderes del grupo terrorista.