En los últimos días, Israel casi ha duplicado el número de permisos concedidos a los trabajadores palestinos de la Franja de Gaza, una de las concesiones aparentes establecidas en una cesación del fuego no oficial que mantiene una tenue calma a lo largo de la frontera.
El jefe de la Cámara de Comercio de Gaza, Maher Tabaa, dijo el pasado fin de semana al diario de propiedad saudí Al-Quds Al-Arabi que Israel ha aumentado la cuota de permisos de “comerciante” de 3.000 a 5.000, y ha rebajado la edad mínima para entrar en Israel de 30 a 25 años.
Dijo que Israel, en coordinación con los líderes de Hamás en Gaza, hizo la movida discretamente tras la tregua mediada por Egipto, Qatar y las Naciones Unidas después de una escalada de dos días en mayo.
Los permisos de comerciantes no son los típicos permisos de trabajo, están diseñados para hombres de negocios que viajan dentro y fuera de Judea, Samaria y Gaza. Pero Tabaa y otros dijeron que la mayoría de los nuevos permisos iban a parar a los trabajadores manuales. El diario Haaretz informó que cientos de jóvenes cruzaron a Israel el lunes en atuendos que sugieren que eran trabajadores.
Un funcionario israelí confirmó el miércoles el aumento de la cuota a The Times of Israel, pero insistió en que los permisos no se concedían a los trabajadores.
Sin embargo, Saleh al-Ziq, un alto funcionario de la Comisión de Asuntos Civiles de la Autoridad Palestina con sede en Gaza, dijo que la cuota no se había modificado recientemente. Dijo que ha sido de 5.000 en los últimos años y que Israel ha empezado a permitir que personas sin “larga historia en los negocios” puedan solicitar permisos en 2018. Desde entonces, dijo que el número de permisos concedidos a los comerciantes palestinos ha aumentado. Dijo que hoy hay unos 4.000 permisos en manos de los comerciantes de Gaza.
Al igual que el funcionario israelí, también negó que los trabajadores estuvieran entrando en Gaza con permisos de comerciantes. Pero dijo que los palestinos de Gaza necesitan decenas de miles de permisos de trabajo para mejorar efectivamente la economía palestina.
Una portavoz de la ONG israelí Gisha también dijo que el cupo de 5.000 permisos se introdujo después de la Operación Borde Protector en 2014 y que nunca se ha cumplido. Dijo que, hasta el día de hoy, 3.227 habitantes de Gaza tienen permisos de comerciantes.
A finales del mes pasado, los gobernantes de Israel y Hamás llegaron a un nuevo acuerdo de alto el fuego en el que los grupos terroristas palestinos detuvieron el lanzamiento de cohetes contra Israel a cambio de medidas israelíes para mejorar las condiciones de vida en el enclave bloqueado.
Desde entonces, Israel ha restablecido el suministro de combustible a la única central eléctrica de la Franja de Gaza y ha ampliado la zona de pesca permitida frente a las costas del enclave, aliviando algunas restricciones recientes.
Desde que la tregua entró en vigor, ha habido un marcado descenso en el número de ataques violentos en la frontera y del lanzamiento de globos incendiarios, aunque no han cesado por completo.
Según Haaretz, al aumentar los permisos de comercio en lugar de los permisos de trabajo regulares, Netanyahu puede satisfacer silenciosamente las demandas de alivio económico de Hamás sin que parezca hacer concesiones impopulares al grupo terrorista.