Exembajador Michael Herzog analiza liderazgo de Biden y Trump, amenaza nuclear iraní y errores en Gaza en entrevista con Maariv.
Michael Herzog sobre división interna y estrategia en Gaza
Michael Herzog, exembajador de Israel en Estados Unidos, describió su mandato de tres años en Washington como uno de los más complejos de su carrera, según una entrevista publicada el 10 de mayo de 2025 en Maariv. Herzog destacó la gravedad de la crisis tras los ataques del 7 de octubre, que desencadenaron tensiones diplomáticas y desafíos en la gestión de la ayuda humanitaria a Gaza. Expresó preocupación por la falta de unidad en Israel, afirmando: “Es difícil entender que después de la peor crisis de seguridad en la historia del país… el Estado de Israel se está hundiendo en una espiral sin precedentes de división interna”. Criticó la ausencia de un plan claro para la posguerra en Gaza, instando a iniciar discusiones con Egipto y otros actores regionales para definir el futuro de la región.
Herzog señaló que Israel evitó por poco conflictos diplomáticos serios con la administración de Joe Biden durante la guerra en Gaza. Reveló que hubo “momentos muy difíciles” en los que su misión fue mantener la estabilidad en las relaciones bilaterales. Sobre la ayuda humanitaria, Herzog afirmó que esta reforzó el control de Hamás en Gaza, un error estratégico. Relató que Benjamin Netanyahu advirtió a Biden sobre el riesgo de que la ayuda cayera en manos de terroristas, pero no se tomaron medidas cuando esto ocurrió. Herzog abogó por una política coherente, dado que Israel es percibido internacionalmente como responsable de la situación en Gaza.
En cuanto a la gobernanza de Gaza tras la guerra, Herzog lamentó la falta de una estrategia clara. “Dijimos que no pondríamos fin a la guerra mientras Hamás siguiera controlando Gaza, y todavía estamos lejos de ese objetivo”, afirmó. Se opuso a una ocupación israelí, argumentando que sería un error estratégico con graves consecuencias legales y diplomáticas. También subrayó la urgencia de priorizar la liberación de los rehenes, incluso si implica pausar los combates, ya que esto afecta la confianza pública en el Estado.
Herzog también abordó el papel de Qatar, acusándolo de jugar un doble juego al apoyar a Hamás mientras mantiene una imagen diplomática favorable. Instó a investigar las operaciones de influencia qatarí en Israel, especialmente en los círculos de poder, citando declaraciones oficiales de Qatar que elogian a líderes terroristas y critican a Israel.
Datos clave sobre la entrevista de Herzog
- Crisis interna: Herzog advirtió que la polarización y división en Israel son una amenaza mayor que los retos externos.
- Gaza: Criticó la falta de un plan para la posguerra y la mala gestión de la ayuda humanitaria, que fortaleció a Hamás.
- Rehenes: Priorizó la liberación de todos los rehenes, vivos o muertos, como objetivo clave para mantener la confianza pública.
- Qatar: Llamó a investigar la influencia qatarí en Israel por su apoyo a Hamás y su ambigüedad diplomática.
Amenaza nuclear iraní y negociaciones con Estados Unidos
Sobre la amenaza nuclear de Irán, Herzog advirtió que el mundo se acerca a un punto crítico en 2025. Según datos de fuentes israelíes citadas por Israel Hayom, Irán posee uranio enriquecido suficiente para 17 bombas nucleares y podría producir una bomba de grado militar en menos de una semana si decidiera avanzar. Herzog delineó cuatro condiciones que Israel debe acordar con la administración de Donald Trump para abordar el programa nuclear iraní: definir el alcance de las negociaciones, establecer las líneas rojas de Estados Unidos, fijar un plazo claro y determinar el respaldo estadounidense a una posible acción militar si las negociaciones fracasan.
Herzog expresó escepticismo sobre los modelos de enriquecimiento limitado, señalando que Irán ha demostrado habilidad para eludir la supervisión internacional y ocultar materiales. destacó que cualquier acuerdo debe incluir los misiles iraníes, no solo el programa nuclear. “Irán ya ha demostrado que sabe cómo manipular la supervisión internacional”, afirmó, según la entrevista en Maariv. Medios en hebreo como Arutz Sheva han destacado la urgencia de una acción coordinada con Estados Unidos para frenar las ambiciones nucleares de Irán, subrayando el riesgo de una escalada regional si no se actúa pronto.
Herzog también abordó la necesidad de una decisión en 2025, ya sea diplomática o militar, para contener a Irán. Fuentes de Jerusalem Post señalan que Israel ha intensificado sus esfuerzos de inteligencia para monitorear las actividades nucleares iraníes, en coordinación con agencias estadounidenses. Herzog destacó que la falta de claridad en las negociaciones podría permitir a Irán ganar tiempo, una táctica que ha utilizado históricamente.
En el contexto regional, Herzog señaló que la postura de Trump sobre Irán podría ser más agresiva que la de Biden, lo que podría beneficiar a Israel en términos de presión sobre Teherán. Sin embargo, advirtió que cualquier acción militar requeriría un respaldo explícito de Estados Unidos para ser viable.
Contraste entre Biden y Trump en la diplomacia con Israel
Herzog comparó los estilos de liderazgo de Joe Biden y Donald Trump, destacando sus impactos en las relaciones con Israel. Describió a Biden como un “verdadero amigo de Israel”, pero señaló que funcionarios de nivel medio en el Departamento de Estado mostraron actitudes reservadas o incluso hostiles hacia Israel, lo que complicó la comunicación. “A menudo tuvimos que pasar por ellos para llegar al secretario de Estado, Antony Blinken”, explicó Herzog en Maariv. Medios en inglés como National Review han reportado tensiones similares, atribuyéndolas a diferencias ideológicas dentro de la administración Biden.
Por otro lado, Herzog caracterizó el enfoque de Trump como disruptivo pero efectivo para generar compromiso regional. “Lanza una granada a la habitación. Hay humo, caos, y luego, en medio de ese caos, Trump comienza a negociar”, afirmó. Destacó que la propuesta de Trump de evacuar Gaza, aunque extrema, motivó a los Estados árabes a presentar propuestas que no habrían surgido de otra manera. Según Israel Hayom, esta táctica generó avances en la cooperación con países del Golfo, que vieron en Trump un catalizador para la acción.
Herzog defendió la postura de Trump hacia Israel, afirmando que va más allá de intereses políticos. “En el fondo, creo que Trump es pro-Israel”, dijo, aunque reconoció que sus decisiones también responden a cálculos electorales. En contraste, la estabilidad de Biden proporcionó a Israel un espacio diplomático predecible, pero con menos presión sobre los actores regionales para comprometerse activamente.
Medios en hebreo como Ynet han resaltado que la transición hacia la administración Trump en 2025 podría fortalecer la posición de Israel frente a Irán y Hamás, pero también introducir incertidumbre debido al estilo impredecible del expresidente. Herzog destacó que Israel debe aprovechar las oportunidades que ofrece el enfoque de Trump mientras mantiene una comunicación clara con Washington.