Varios grupos terroristas palestinos, que responsabilizan a Israel y a EE.UU., han condenado el asesinato del científico militar iraní Mohsen Fakhrizadeh en las afueras de Teherán el viernes.
La Autoridad Palestina, mientras tanto, no hizo comentarios sobre el asesinato. Las relaciones entre Ramallah y Teherán han sido tensas debido al continuo apoyo de Irán a Hamás y otros grupos terroristas palestinos.
Hamás dijo que el asesinato “coincidió con las continuas amenazas americanas y sionistas contra la República Islámica de Irán con el objetivo de privarla de la posesión de herramientas científicas avanzadas para que permaneciera [solo] en manos de la ocupación sionista”.

El asesinato de Fakhrizadeh, advirtió Hamás, conduciría a “un caos y una inestabilidad que sirven principalmente a los intereses de la entidad sionista”. Hamás ofreció “sinceras condolencias” al pueblo y a los líderes iraníes por el “martirio de este científico nuclear”.
La Jihad Islámica Palestina (PIJ) condenó el “despreciable ataque terrorista”, apodándolo “un cobarde asesinato que lleva las huellas” de Israel y los EE.UU.
“Este cobarde acto terrorista tiene como objetivo los elementos del progreso científico del mundo islámico en general y de la República Islámica de Irán en particular”, dijo el PIJ en una declaración. “Este es un intento desesperado de castigar a Irán por defender las causas justas de los débiles del mundo, incluyendo la cuestión palestina”.
Ahmed al-Mudalal, un alto funcionario del PIJ, dijo que Israel y los EE.UU. “no podrán subyugar a nuestros países árabes e islámicos”. Expresó su confianza en que Irán será capaz de “responder duramente a este crimen”.

Con base en la Franja de Gaza, Hamás y la Jihad Islámica Palestina han estado recibiendo desde hace mucho tiempo ayuda financiera y militar de Irán.
El grupo terrorista Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) de la OLP denunció el asesinato de Fakhrizadeh y dijo que era parte de un plan americano-israelí para “atacar a Irán por su oposición a la existencia de la entidad sionista”.
El FPLP expresó su confianza en que Irán sería capaz de “absorber su pérdida y lograr un mayor progreso que refleje el desarrollo de las capacidades iraníes en varios niveles, incluyendo el militar y de seguridad”.
Los Comités de Resistencia Popular, una coalición de varios grupos terroristas con sede en Gaza, condenaron el asesinato del científico nuclear como “terrorismo de Estado” y dijeron que los autores debían rendir cuentas.
El Movimiento de los Muyahidines Palestinos, también con sede en la Franja de Gaza, responsabilizó a Israel del asesinato. Dijo que la política de asesinar a científicos y expertos no disuadirá a los musulmanes de enfrentarse a Israel y a los Estados Unidos.