De visita en la sede de la agencia de seguridad Shin Bet en el norte de Samaria, el primer ministro Naftali Bennett dice que Israel está entrando en un período de “rutina vigilante” mientras las fuerzas de seguridad trabajan para evitar nuevos ataques terroristas.
“Los terroristas tienen todo tipo de ideas, por lo que estamos en alerta máxima, tanto el Shin Bet como la Policía de Israel, para identificar cualquier rastro de una idea o plan para un ataque, y frustrarlo con antelación”, dice Bennett, después de que las tropas mataran a tres hombres armados que presuntamente se dirigían a un ataque en Israel ayer por la mañana.
Bennett dice que las Fuerzas de Defensa de Israel también están en alerta máxima a lo largo de la barrera de seguridad de Cisjordania, después de que una brecha en la valla fuera utilizada por un palestino que mató a cinco personas en un ataque a tiros en Bnei Brak la semana pasada.
“Nuestro objetivo es romper la ola” de ataques, dice Bennett.
“Ahora estamos entrando en un periodo de ‘rutina vigilante’, en el que queremos que los ciudadanos de Israel vuelvan a su rutina [diaria] y que las fuerzas de seguridad estén en alerta máxima”, afirma.
El jefe del Shin Bet, Ronen Bar, afirma que la agencia de seguridad opera “en muchos escenarios”: Israel, Cisjordania y la Franja de Gaza.
Dice que el Shin Bet es “una organización aguda, decidida y hábil que aprende mientras está en movimiento y bajo fuego”.
“El sábado estuvimos bajo fuego junto con nuestros hermanos del Yamam. Frustramos un ataque importante”, dice Bar sobre el incidente cerca de Yenín, durante el cual un oficial de élite resultó gravemente herido.