En una reunión con los alcaldes y jefes de ayuntamientos cercanos a la frontera con Líbano, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, aseguró que las comunidades que fueron evacuadas no retornarán a sus hogares hasta que Hezbolá, el grupo terrorista respaldado por Irán, sea desplazado al norte del río Litani. Esta información fue confirmada por los medios hebreos.
La Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que terminó la Segunda Guerra del Líbano en 2006, prohíbe a Hezbolá mantener una presencia militar al sur del Litani, a unos 30 kilómetros al norte de la frontera entre Israel y Líbano. Sin embargo, Hezbolá ha infringido esta resolución, atacando a Israel desde las cercanías de la frontera.
Durante la reunión en Nahariya, Gallant sostuvo que la mejor opción para Israel es establecer un acuerdo diplomático que haga cumplir la Resolución 1701. En caso de no tener éxito, Gallant aseguró a los líderes locales que Israel “actuará con todos los medios a su alcance” para repeler a Hezbolá mediante acciones militares.
Alrededor de 80.000 residentes de comunidades situadas hasta 10 kilómetros al sur de la frontera con Líbano han sido evacuados y se encuentran alojados temporalmente en hoteles y otras instalaciones, con ayuda financiera del estado. Varias de estas personas han manifestado su preocupación por los peligros que podrían enfrentar al regresar a sus hogares, si Hezbolá no es alejado de la zona fronteriza.