El primer ministro Benjamin Netanyahu dijo al presidente ruso Vladimir Putin que Israel estaba dispuesto a actuar para evitar una presencia militar iraní en Siria, durante una reunión de tres horas entre los dos líderes en el centro turístico de Sochi, en el Mar Negro.
“La mayor parte de la discusión trató del intento de Irán de establecerse en Siria en los lugares donde ISIS fue derrotado y expulsados”, dijo Netanyahu después de la reunión.
“La victoria sobre ISIS es bienvenida. La entrada de Irán no es bienvenida, nos pone en peligro y, en mi opinión, pone en peligro la región y al mundo”, añadió Netanyahu.
Sus comentarios se hicieron eco de los del jefe de la agencia de inteligencia del Mossad, Yossi Cohen, quien también estuvo presente en la reunión de Sochi, quien dijo la semana pasada que a medida que el grupo islámico es derrotado, Irán y sus proxies se apoderan de su territorio.
Netanyahu dijo que “habló muy claramente al presidente Putin acerca de nuestras posiciones sobre este asunto y el hecho de que esto es inaceptable para nosotros”.
En declaraciones a periodistas israelíes en una conferencia telefónica después de la reunión, Netanyahu informó que le dijo a Putin que Israel tomaría medidas si cruzaban sus “íneas rojas”.
“Actuaremos cuando sea necesario según nuestras líneas rojas”, dijo Netanyahu. “En el pasado, hemos hecho esto sin pedir permiso, pero hemos proporcionado una actualización de lo que es nuestra política”.
Según informes, Cohen proporcionó a Putin “inteligencia detallada sensible, creíble y muy inquietante” sobre la presencia militar de Irán en Siria durante la reunión.
La visita se produce después de que una importante delegación israelí compartió la misma evidencia con los estadounidenses la semana pasada. Israel está tratando de limitar la expansión de Irán en la región.
Se dice que Irán está intentando forjar un corredor terrestre desde Irán, a través de Irak y Siria, hasta Líbano, donde su aliado Hezbolá opera.
Netanyahu se reunió por última vez con Putin en Moscú en marzo, pero los dos han hablado por teléfono con frecuencia desde entonces.
“Los dos fijaron la reunión para discutir los últimos acontecimientos en la región”, se dijo en una declaración de la Oficina del Primer Ministro el sábado, agregando que “hay que señalar que en los últimos dos años el primer ministro Netanyahu se ha reunido con el presidente Putin cada pocos meses para debatir cuestiones bilaterales y regionales con la intención de evitar cualquier choque entre las fuerzas aéreas israelíes y rusas en Siria, con éxito hasta ahora”.
Rusia entró en la guerra civil siria en 2015 en apoyo del régimen del presidente sirio Bashar Assad, realizando bombardeos contra grupos rebeldes que luchan contra Assad. Assad también está respaldado por Irán, que ha proporcionado dinero al líder sirio, hombres y material.
Si bien Israel raramente ha reconocido la realización de sus propios ataques aéreos en Siria, numerosas incursiones contra las transferencias de armas se han atribuido a Jerusalén.
A pesar de la coordinación entre los dos países, algunos de los ataques aéreos israelíes en Siria sobre convoyes de armas han provocado tensiones entre Jerusalén y Moscú.
En abril, Moscú convocó al embajador de Israel en Rusia, Gary Koren, para protestar por un ataque israelí que casi golpeó a las tropas rusas estacionadas en la zona. El embajador sirio en la ONU dijo más tarde que Rusia había cambiado su política y ya no otorgaría a Israel libertad de acción sobre el cielo sirio.
Netanyahu negó posteriormente informes de que Moscú le había dicho a Israel que pusiera fin a los ataques aéreos en Siria, prometiendo que las FDI seguirían atacando a los convoyes de armas que fortalecen a Hezbolá en la frontera con Israel.