En un evento de conmemoración del Holocausto en el cuartel general del Mossad, el jefe de la agencia de espionaje, David Barnea, dijo: “Hoy, más que nunca, el dicho «Nunca más» es una obligación moral para mí y para todos nosotros”.
Barnea dice que el Mossad “tiene la orden de seguir siendo la mejor agencia de inteligencia del mundo, decidida y resuelta frente a aquellos que se levantan para destruirnos… Se nos ordena cumplir nuestro propósito de proteger a israelíes y judíos en todo el mundo”.
Dijo que el Mossad “no dejará piedra sin remover” en su misión de devolver a los rehenes retenidos por Hamás “a sus seres queridos, sus familias, sus hogares”.