El líder de la oposición, Yair Lapid, afirma que Israel debería aceptar de forma parcial el llamado conjunto de Estados Unidos y Francia para una tregua inmediata entre Israel y Hezbolá, pero solo por siete días y no por 21, con el fin de evitar que la organización terrorista se reagrupe.
“El Estado de Israel debería anunciar esta mañana que acepta la propuesta de alto el fuego de Biden y Macron, pero solo por siete días, para no permitir que Hezbolá restablezca sus sistemas de mando y control”, tuiteó. “No aceptaremos ninguna propuesta que no incluya la retirada de Hezbolá de nuestra frontera norte”.
“Cualquier propuesta que se presente debe permitir que los habitantes del norte regresen de inmediato y de forma segura a sus hogares y conducir a la reanudación de las negociaciones para un acuerdo sobre rehenes con Hamás”, continúa, afirmando que “cualquier violación del alto el fuego, incluso la más mínima, llevará a que Israel ataque de nuevo con toda su fuerza y contra todas las partes del Líbano”.
La declaración de Lapid se produce un día después de recibir un informe de seguridad del primer ministro Benjamin Netanyahu.
En respuesta a Lapid, el presidente del partido Nueva Esperanza, Gideon Sa’ar, señala que en realidad “solo Hezbolá se beneficiará” de un alto el fuego temporal.
Ze’ev Elkin, miembro del Comité de Asuntos Exteriores y Defensa de la Knéset y miembro del partido Nueva Esperanza, coincide y tuitea que una suspensión de ese tipo “solo permitiría a Hezbolá recuperarse de los golpes recibidos y reorganizarse para la lucha”.
“La exigencia israelí en el Líbano debe ser clara y contundente: no debe haber un alto el fuego temporal, sino solo un alto el fuego permanente, sin ninguna conexión con la continuación de los combates en Gaza, y con el traslado de Hezbolá más allá del río Litani”.