La ministra del Interior, Ayelet Shaked, se encuentra actualmente en Washington, donde está trabajando para promover la exención de la obligación de visado para los ciudadanos israelíes que visitan Estados Unidos.
“La administración estadounidense muestra una gran voluntad de resolver esta cuestión. Durante más de diez años los distintos gobiernos israelíes han estado tratando con los distintos gobiernos y ahora hay una oportunidad cuando el secretario de Seguridad Nacional, con quien me reuniré mañana, es una persona que ama a Israel”, dice Shaked en una entrevista con Arutz Sheva.
Señala que ella trabajó con el secretario de Estado de EE. UU. en este tema durante la Administración de Obama. “Dentro del Estado de Israel, nosotros también hemos progresado y hemos eliminado la mayoría de los obstáculos. Ahora hay dos obstáculos principales y son el deseo de los estadounidenses de tener acceso a nuestros antecedentes penales y el porcentaje de denegaciones que debe reducirse. Estos son los dos principales obstáculos y espero que dentro de uno o dos años lo solucionemos y podamos por fin viajar a Estados Unidos sin visado”.
En cuanto a la relación entre el gobierno israelí y el estadounidense en relación con los temas de la construcción de asentamientos y la apertura de un consulado para la Autoridad Palestina en Jerusalén, Shaked dice que sí hay desacuerdos entre las partes. “No tenemos que estar de acuerdo en nada ni en todo. La posición israelí sobre el consulado ha sido aclarada a todos los funcionarios del gobierno. El gobierno israelí no estará de acuerdo con la apertura de un consulado en Jerusalén”.
Shaked aclara que la posición israelí de que la construcción en Judea y Samaria continuará como parte integral del Estado de Israel es bien conocida por el gobierno estadounidense. “Queremos desarrollar estas zonas. Es cierto que con una administración demócrata es un tema complejo y hay objeciones, pero al final el Estado de Israel debe hacer lo que le importa y salvaguardar sus intereses”.
Durante su visita a Estados Unidos, la ministra Shaked se reunió con representantes de la comunidad judía en Estados Unidos después de un largo periodo en el que la pandemia de coronavirus impidió a los funcionarios del gobierno israelí mantener el contacto con la comunidad allí. “Fue un acontecimiento muy difícil y me alegro de que ahora todos los que están vacunados puedan venir. Hay un reto muy grande aquí para la comunidad judía para hacer frente al antisemitismo y al BDS. Desgraciadamente, no hace dos años que estoy aquí y veo que el movimiento BDS se ha fortalecido y el antisemitismo ha aumentado. Incluso dentro de la comunidad judía, el apoyo al Estado de Israel se está debilitando. Es un reto muy grande para la comunidad de aquí y el gobierno israelí luchar juntos contra los libelos de sangre y las noticias falsas y fortalecer la conexión de la comunidad judía, especialmente la parte liberal, con el Estado de Israel”.